Es difícil imaginarse con qué cara los congresistas de los partidos nacionales legislan (mal) sobre problemas locales (municipales y regionales) cuando sus esferas de poder y actuación están tan lejanas de esos centros de trabajo. ¿Cómo pueden saber lo que se cuece en unas provincias a las que simplemente no llegan? No es que lleguen mal, es que no están ahí. Nunca. Fj ha publicado, en Elecciones – De Igual a Igual, una interesante tabla que contiene todos los partidos que se han presentado a las alcaldías provinciales y cuáles son los que han ganado en las mismas.
Categoría: Actualidad del Perú
Minientrada: Lima Amarilla
Pueden ver el mapa político de Lima tras las elecciones provinciales y el artículo en Elecciones – De Igual a Igual (por mí). También en Útero.pe (por Marco Sifuentes). Gracias a FJRA.
Crónica de una victoria anunciada (minientrada)
Puf. Pues sí, era una crónica anunciada, ¿cómo no iba a serlo con la ventaja que tenía en las encuestas? Lo raro es que no haya superado el 50% (tampoco lo necesita para llevarse la mayoría absoluta en el consistorio, sea dicho). Lo rozó, eso sí, con el 49% (según la ONPE en estos momentos). Lo único «destacable» es la horrible posición en que finalmente quedó la actual alcaldesa: tercer lugar. A duras penas Villarán superó el 11% de los votos válidos, muy por detrás del candidato del APRA, que se llevó el 19,42% de los votos válidos. También podemos hablar del lugar que ahora ocupará el PPC, que no solo perdió a su principal aliado (no olvidemos que SL fue parte de UN, Castañeda fue alcalde dentro de esa coalición donde mandaba el PPC, al menos en teoría), pasando de ser el partido más importante del ayuntamiento (tras la revocatoria) a… ¿le cae algún regidor? En fin, siga las elecciones limeñas en «Elecciones – De Igual a Igual». (Actualización: al 78% procesado, Castañeda sí supera el 50% de los votos válidos; tacho la parte en que hacía referencia a eso).
Casañeda se queda
Y, según van las cosas, puede que también consiga la alcaldía limeña
El Jurado Nacional de Elecciones (JNE), mediante la Resolución N.° 2449-2014-JNE (PDF) no ve falsedad en la información consignada por Castañeda Lossio en su hoja de vida, sino, simplemente, una «ausencia de precisión» en la información (sobre el caso, vean mi nota anterior) y manda a corregir la hoja de vida y que todo continúe.
¿Qué pasará con el candidato que va primero en las encuestas?
Actualización (6/7): Castañeda gana el recurso y continua en la carrera electoral.
Óscar Luis Castañeda Lossio, candidato a alcalde de la Provincia de Lima por Solidaridad Nacional (su cortijo) puede quedarse fuera de la carrera electoral tras la resolución del JEE Lima-Centro* (a ver qué dice el JNE) y todo por una minúscula y absurda mentira (no, no es un «error material» cuando: a) ya te avisaron en otro proceso que consignes bien esa misma información; b) en la misma lista hay candidatos que ponen bien esa información; ambos extremos como muestran en El Útero).
Sí pero no
El Comercio, en una huida para adelante, saca una de esas «aclaraciones» que no llegan a ser una verdadera rectificación (en el fondo ni en la forma). Así, en una pequeña nota, afirman: «La información que publicamos no implica que los artistas apoyaran el No por la existencia o expectativa de contrataciones». Si vemos la noticia original («Gestión de Susana Villarán contrató a rostros del No») en cuya bajada directamente se pone: «La Municipalidad de Lima pagó por servicios a artistas que luego apoyaron a la alcaldesa en el proceso de marzo del 2013» creo que la aclaración no es tal. La «noticia» que levantó polémica fue la principal de la portada del periódico el 15 de agosto cuya intención, evidentemente, era dejar patente la relación directa entre que la municipalidad de Lima contratara a determinadas personas con su campaña en favor de Villarán.
AFP y tal, hay que toquetearlo todo
Es interesante cómo el debate sobre las aportaciones a los fondos de pensiones privados (sobre todo) o el sistema en su conjunto ha ganado fuerza últimamente, tiene mucho que ver con que haya tocado el bolsillo de quienes pueden poner el grito en el cielo y conseguir que se les haga caso; marcar la agenda. Hace ya años se dio toda una lucha para poder pasar de las AFP al sistema público sin las penalizaciones existentes y, en realidad, haciendo una especie de borrón y cuenta nueva. Lo que pasa es que para las rentas medias y medias altas las AFP son rentables (o pueden serlo) mientras que para las bajas nada, corriendo el riesgo de que lo aportado ni siquiera garantice toda la vejez con un sueldo (un error de diseño en cualquier sistema de pensiones que quiera llevar ese nombre). Las AFP son un gran negocio. ¿Para todos? Puede que para los contribuyentes no. Y como sistema dejan mucho que desear.
Informalidad y seguro de desempleo
Estos días una de las noticias que dio un poco la tabarra en los medios fue la «liberalización parcial» de las CTS (Compensación por Tiempo de Servicio) por parte del gobierno y esas bancadas que dan el visto bueno a cosas absurdas en paquetes libres de todo debate; lo pueden ver en diversos medios con reflexiones variopintas (Godoy, Davelouis, Alonso, entre otros muchos). Lo interesante es que la CTS la tienen cuatro gatos mal contados. La CTS es una suerte de seguro de desempleo que funciona bajo un sistema de capitalización individualizado (el trabajador tiene un depósito con su nombre y apellido en una entidad financiera y un dinero que él no toca -otros sí: la entidad financiera-). Es un sistema que está realmente lejos de ser universal (sin ir más lejos, todos los trabajadores de régimen general que tengan contratos a tiempo parcial inferior a cuatro horas diarias no tienen derecho).
Candidaturas a Lima: negro panorama
Susana Villarán está muy lejos de las expectativas que creó, y no solo por la dura oposición que ha tenido (contando la victoria pírrica en la revocatoria y esas elecciones suplementarias del año pasado donde la oposición barrió), sino por su mala gestión en puntos claves, como la participación ciudadana, transporte, seguridad… además de un incorrecto modo de tratar a sus alianzas por la izquierda (las que en teoría le llevaron a la alcaldía y le estuvieron manteniendo hasta la revocatoria). Ese maltrato se ve también en la propia campaña de la revocatoria, absolutamente centrada en la figura de Villarán en detrimento de los compañeros electorales, que vieron cómo casi todos eran echados del ayuntamiento mientras que la burgomaestre se salvaba. Además de las promesas incumplidas. No me refiero a las que no pudo cumplir (ciertos cambios, ciertas obras, ciertas mejoras) sino de las que prefirió incumplir, entre ellas la reelección.
No pude salir más barato incumplir que cumplir
No pocas veces en Perú nos encontramos con procesos de «regularización» que sirven, más bien, como premio a quien incumple. Así los incentivos desde lo público no son a la realización de las obligaciones (tributarias, laborales, económicas, las que sean) sino más bien hacia el incumplimiento constante y luego pagar poco o nada de multa. Literalmente. ¿Cómo «reactiva» la economía este gobierno? Rebajando las sanciones por incumplir la legislación laboral, la tributaria, la ambiental (con una importante reducción del papel fiscalizador por parte del Estado, además) y toda la que se cruce por el camino.
Popurrí de comentarios
Estos días se han ido juntando los temas, uno detrás de otro, pero no siempre con «entidad» suficiente (de mi parte, no por el tema en sí). Intentaré ser breve, incluso con los más novedosos.
El triste final de la primavera árabe en Egipto
No solo en Egipto terminó mal, pero fue uno de los puntales en todo esto. Esos periodistas condenados por «apoyar a los Hermanos Musulmanes» (organización declarada terrorista tras el golpe de Estado; no son, claro, los primeros represaliados, ni serán los últimos) que no ha levantado gran queja por los gobiernos occidentales que, a su vez, mantienen su apoyo a Abdel Fattah el-Sisi (sí, el que dio el golpe de Estado contra Morsi y ganó unas nada limpias elecciones hace un mes). Y ese es el tema, al imperialismo occidental le importa tres cominos si en Egipto hay o no hay respeto alguno por los derechos humanos, si hay o no hay democracia, lo único que les importa es que quien gobierne sea amigo suyo. Lo único que diferencia a Sisi de Mubarak es que el segundo al menos no dirigió un golpe contra el gobierno del que formaba parte.
Las parábolas las carga el diablo
La analogía (forzando: la parábola) de Cipriani para explicar por qué se opone a la Unión Civil y todos deberían hacerlo creo que es un tiro al pie:
«Sí es un derecho vivir, es un derecho de todos, pero si tú quieres ‘yo quiero que los días jueves ir en bicicleta por el medio de la avenida Brasil’. Perdón, eso no es democracia, nos hemos puesto de acuerdo para que la avenida Brasil sea para carros, tú tendrás que ir en bicicleta por la derecha. ‘Pero, ¿cómo? No respetan el derecho de las minorías’. No, todos nos hemos puesto de acuerdo, como no es un derecho fundamental, hemos decidido que tú irás por la derecha de la avenida, hay muchos carros por el centro.»
Muchos ya han respondido a esa parábola, entre ellos Cynthia Yamamoto (Utero.pe) lo hace con tino. Creo que hay motivos para estar contra el proyecto de Ley 02647/2013-CR (por escaso, eso sí), pero, en todos los casos, hay que tener siempre cuidado con las parábolas y analogías.
Sobre la marcha por la Unión Civil
Ayer la conservadora Lima, dentro del muy conservador Perú, celebró la marcha en favor de la Unión Civil entre personas del mismo sexo (fotos). Fue un éxito. Es que ya lo era desde el momento en que cumplió uno de sus objetivos: visibilizar el reclamo, el tema. Incluso El Comercio ha estado abordándolo bastante y no de forma unidimensional -más desde las columnas de opinión (con dos líneas de comentarios contrapuestas), y dejando más espacio para los incendiarios en la parte de las noticias-. Sobre el tema, una bitácora que lo ha tratado bastante y, además, bien, es la del Útero, así que les dejo el enlace hacia la etiqueta «Unión Civil» y vayan navegando por esa página.
Con votos y sin confianza (real)
Una pequeña nota de prensa, por lo visto, fue todo lo que necesitó el PPC para cambiar el sentido del voto. Ya saben, no hay como decir «verde» para que dicho color sea verídico y palpable. Así que, con esa advertencia cromática, ya podemos dar por hecho, al menos en principio, que la primera dama, Nadine Heredia, no influirá nadita en este gobierno de gabinete con confianza recién ganada. Por los pelos. Ollanta Humala respira tranquilo.
Sin confianza
Lo que normalmente es un trámite se ha convertido en una nueva crisis del gobierno de Ollanta Humala. Ni en primera ni en segunda votación el nuevo gabinete consiguió el voto de confianza por parte del Congreso. Mientras el presidente de la república juega la carta «díganme amén a todo para que el país avance» -típica salida tangencial- los ministros han obrado como se espera en un caso así, poniendo el cargo a disposición del Jefe del Estado.