Las elecciones son el lejía de los sistemas políticos, los blanquea y hace pasar por democracias. Eso ha pasado en Honduras, una elecciones sin condiciones siquiera buenas, persecución de políticos y militantes, derechos recortados y demás, pero ya Estados Unidos (quien más importa en este caso) ha dado el visto bueno al resultado (que, oh casualidad, coincide con sus deseos geopolíticos)… Un artículo para De Igual a Igual: «Honduras: Falsas apariencias y hechos consumados».
Etiqueta: elecciones
Sobre la última encuesta ante las elecciones chilenas (II)
Como decíamos ayer, hoy más, pero no mejor. Vamos a ver las preferencias electorales con los datos segmentados, por un lado, por edad, y por otro, por la autoconsideración de izquierda-derecha que tiene el individuo sobre sí mismo, y vamos a mostrar los datos con respecto a la clasificación que esos mismos individuos tienen de Enríquez-Ominami (como se deduce del artículo anterior, no es lo mismo hablar de una media o una mediana que de un subgrupo determinado), mantenemos la visión en seis categorías de derecha a izquierda e indefinidos en vez de usar la escala dada en la encuesta.
Sobre la última encuesta ante las elecciones chilenas
Carlos Meléndez (alias Jorobado) en su última columna para Correo, «Elecciones en Chile 1: Frei vs. Enríquez-Ominami» realizó una interesante aproximación a las elecciones en el país vecino, viendo por un lado la desafección que poco a poco se da con el sistema político y cómo los «jóvenes» se inclinan por el candidato «independiente» justo en detrimento del oficialista. Hay que tener en cuenta, para comenzar, que el «independiente» no es un «outsider», ni ha sido durante mucho tiempo «independiente», es un diputado díscolo del PS que ha renunciado a su partido para lanzarse en solitario y ha conseguido el apoyo de nuevos partidos (como los ecologistas) y de viejos lobos chaqueteros (como los humanistas).
Nicaragua: La vía costarricense
¡Qué tendrá el poder que todos quieren repetir! En Nicaragua, la Sala Constitucional de la Corte Suprema ha dado el visto bueno a que Ortega (y otros tantos cargos públicos) pueda volver a ser candidato, en contra de la literalidad actual de la Constitución del país centroamericano, en cuya carta magna, artículo 147, se expresaba que no se podía optar a la reelección consecutiva (como en Perú) o a un tercer mandato. Este límite temporal, en Nicaragua, se introdujo en la reforma parcial de la constitución, Ley Nº 192 de 1995, que es contra la que va la Sentencia dictada por la CS.
Siguen queriendo complicarlo todo
Cuando el Partido Nacionalista Peruano se vio impedido de presentarse a las elecciones generales de 2006 buscó un partido que sí podía para hacer una extraña amistad y tirarse a la piscina electoral, fueron el partido más votado para el Congreso y ganaron la primera vuelta (UPP, no eran una «coalición electoral», en el sentido legal de la expresión, más bien, miembros del PNP se presentaron por UPP, contando el candidato presidencial), en esas elecciones una barrera electoral nacional impidió a un partido, el segundo más votado en La Libertad (por delante de UPP y UN, por detrás del APRA) consiguiera un escaño (peligraron tres curules, los del PP consiguieron saltar la valla), tras esas elecciones (y la reválida de las municipales y regionales), el propio PNP junto con muchos otros partidos perdieron su inscripción gracias a la ley de Partidos. La ley de Partidos, para seguir abundando, tiene una exigencias altísimas para poder inscribir formaciones políticas, busca grandes partidos y solo encuentra formaciones que, una vez en el Congreso, explotan por todos lados (buenos ejemplos son UN y UPP, divididos en infinidad de grupos, y la cantidad de «no adscritos» que ahora pululan por el parlamento, gracias, en cierta medida, a los tejemanejes nada claros del APRA y que nuestros políticos estén en venta constante).
Resultados de las elecciones en Grecia
La tercera vía gobernará Grecia (república parlamentaria). Los socialdemócratas del Movimiento Socialista Panhelélico (Πανελλήνιο Σοσιαλιστικό Κίνημα, Panellínio Sosialistikó Kínima, ΠΑΣΟΚ o Pa.So.k.) recuperarán el gobierno del país heleno tras las derrotas de 2004 y 2007, con, previsiblemente, mayoría absoluta, si se confirma esa clara superioridad por encima del 43% de los votos, que serían entre 150 y 159 de los 300 parlamentarios de la única cámara legislativa griega. Con este resultado aumentarían sensiblemente con respecto al anterior parlamento, elegido en el 2007, cuando se quedaron con tan solo 102 asientos (aunque una votación superior al 40%).
¿Un distrito electoral para los peruanos en el extranjero?
El aprista José Macedo Sánchez, con el apoyo de su bancada, ha presentado el pasado 25 de septiembre una propuesta para crear el distrito electoral especial para los peruanos en el extranjero (03525/2009-CR). Y no, esta vez no se pide el aumento de congresistas (como se hizo cuando se creó el distrito de Lima – provincias).
Sobre el sistema electoral español
«Si la “representación proporcional” que prescribe la constitución es entendida como principio político que apunta a definir un determinado tipo de de democracia representativa, habría que convenir en la existencia de una discordancia entre tal prescripción y el plano de la práctica y la legalidad electoral, dando alguna base para exigir el respeto a la previsión constitucional y corregir el rumbo desviado que fomentan las normas de desarrollo de la misma»*
Rodríguez Zapatero tiene, en parte, razón, cuando afirma que «a priori» la ley electoral vigente (Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del Régimen Electoral General, LOREG) no beneficia a nadie. Y digo en parte porque tendríamos que ir a supuestos muy abstractos y de una real fragmentación de partidos (digamos, que en cada circunscripción electoral, la provincia, se presentaran partidos diferentes que en el resto de circunscripciones) para encontrar un supuesto en que la ley electoral que rige en España, que se basa en las disposiciones constitucionales sobre la demarcación territorial, no beneficiaria a ninguna formación. Pero la realidad es otra, la realidad es que la ley electoral penaliza al tercer y cuarto partido de todas las circunscripciones pequeñas y deja poco margen para los mismos en las circunscripciones grandes.
Resultados: Elecciones en Portugal
En Portugal el centro izquierda de los socialdemócratas del Partido Socialista (PS) obtuvo una amplia victoria con el 36,56% de los votos válidos en las últimas elecciones para la Asamblea de la República con lo que, previsiblemente, renovará gobierno el primer ministro José Sócrates Carvalho (en Portugal rige una república parlamentaria, con un presidente que es el jefe de Estado que se elige por voto directo y un gobierno que es elegido por el parlamento nacional, siendo el primer ministro la figura política más importante en la práctica). Los socialdemócratas pierden la mayoría absoluta de la que disponían, pasando de 120 curules a 96 escaños (de una cámara con 230 asientos). En estas elecciones cabe destacar la baja participación, de tan solo el 60,6% del padrón electoral, y de estos, un 3% fueron votos nulos o blancos.
Alemania sigue girando a la derecha
Sigue girando para la derecha tras las últimas elecciones, Angela Merkel volverá a ser la Canciller alemana pero esta vez en coalición con los liberales del Partido Democrático Libre (Freie Demokratische Partei, FDP) dejando a un lado el horroroso pacto con los socialdemócratas más viejos de Europa, el SPD (Sozialdemokratische Partei Deutschlands), que ha sufrido un batacazo electoral de mucho cuidado.
¿Fracasan las listas abiertas?
Saben que el tema electoral, en ese mundo que se mueve a caballo entre la teoría y la práctica, es uno de mis favoritos, le dedico tiempo en todos los sentidos, de una forma ruidosa a veces, y otras más bien callada. Saben que soy partidario de cualquier forma que mejore la proporcionalidad (en otras palabras, prefiero los sistemas proporcionales a los mayoritarios) y que creo que se deben buscar fórmulas para permitir una mayor democracia tanto dentro de los partidos como a la hora de votar… ¿Y todo esto por qué lo digo? Listas abiertas y su no funcionamiento, ejemplo sobre un pueblo concreto e hipótesis al respecto.
Extrapolando resultados
Está claro que los resultados de unas elecciones europeas, máxime con tan baja participación, no son totalmente extrapolables a las elecciones generales, entre otras cuestiones porque los partidos las afrontan diametralmente distintas, y se presentan algunas cuantas formaciones regionales que a las europeas ni lo intentan (por lo que sea) o se forman alianzas electorales concretas para sumar lo que sería un voto disperso pero similar (como es el caso de Nafarroa Bai). Pero aun así, a sabiendas que todos tienen razón, ya sea para contentarse con un mal consuelo o para no vender la piel del oso antes de cazarla, puede ser interesante hacer la aplicación de los votos europeos como si fueran para el Congreso de los Diputados. Ya saben, además, que me gusta esto de jugar con los datos electorales.
Sobre los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo
Más derecha, más fragmentación y pequeños brotes verdes… «Ganó la abstención» en De Igual a Igual.
Elecciones UE: En Holanda y Reino Unido avanza la derecha
En Reino Unido los comicios para el Parlamento de la Unión Europea van a la par que las elecciones locales, cuyos primeros resultados indican que los socialdemócratas de la tercera vía del Partido Laborista que actualmente gobierna dicha monarquía europea ha sufrido un varapalo electoral de tente quieto y no te menees, perdiendo representación en muchas localidades, donde los conservadores arrasan y los liberales (actual tercer partido) consigue buenos resultados que lo colocan como segunda fuerza.
Hacia el sistema mayoritario en Venezuela
Al margen de la absurda disputa dialéctica entre Hugo Chávez y los Vargas Llosa, y de las nacionalizaciones de empresas, lo que está pasando en el plano electoral es sumamente importante (posiblemente más, mucho más, que los dos hechos anteriores). En Venezuela se va a cambiar un sistema (defectuoso, eso sí) proporcional para favorecer uno mayoritario, con el agravante que tal vez el voto valga por dos (el de cada uno, pero esto favorecería, obviamente, a los partidos más grandes en detrimento del resto). Ojo, esto no es, ni mucho menos, un movimiento «antidemocrático» (como he visto retratado en algún medio), pero sí claramente contrario a la proporcionalidad, en la línea de países como Italia o Reino Unido (iba a poner de ejemplo el senado español, pero desde hace más de 30 años su labor es ninguneable).