Derechos humanos y contingencias políticas.

Un interesante artículo de Roberto Ávila Toledo (uno de los abogados que llevaron a cabo la querella contra el -ex y próximo- mandatario peruano Alan García Perez por delitos de Lesa Humanidad, acá hablamos de ello) hizo que me vuelva a plantear muchas cuestiones que, desde siempre, han girado en torno a los Derechos Humanos. Sobre todo cuando los mismos pierden ante la contingencia política. El artículo no tiene desperdicio, léanlo, es una lágrima frente a la realidad y el poliquiteo.
Realmente todos los partidos sufren ciertos personajes, que ponen por delante intereses legítimos (no hablo de corrupción o intereses particulares, sino buenas intenciones como la seguridad, la paz, el buen desarrollo de las relaciones internacionales, y cuestiones similares) sobre los derechos humanos, sobre la lucha contra la impunidad, sobre cualquier atisbo de Estado de Derecho y cumplimiento de cualquier norma dirigida a la dignidad de las personas, cuando al "contrario" se le ve como escoria, se puede pisar por completo a la misma, por el "bien común". Ese es uno de los grandes males del funcionamiento de nuestra sociedad, que justifican hechos como los llevados a cabo por Israel, o cárceles como las de Guantánamo, sean del país que sean.

Se fusiló a unas 300 personas (presas todas ellas) de forma extrajudicial, después de que se rindieran tras unos motines en tres cárceles, dentro de una coyuntura poco favorable a la calma de los militares frente a los supuestos terroristas (o colaboradores), al día siguiente, para tapar todo, Alan García decretó que los penales eran "zona militar exclusiva", con lo cual todo pasó a la jurisdicción militar (¿Les suena? Hay un presidente gringo que ha hecho lo mismo… si es que esas tácticas ni son nuevas ni originales).

Como nos recuerda el abogado socialista chileno, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ordenó al Estado Peruano que investigara y sancionara la muerte y desaparición de esos presos, pero no ha llegado a puerto alguno, nada de nada, que acá mata quien puede quedar impune, que por algo es gratis. Y a ello se le suman las conclusiones de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, describen bien esa época, esos hechos… En fin, que ese no es el tema de este artículo, pero sí sirve para recordar que estamos hablando de hechos graves, que no deben quedar impunes.

Por cierto, para los seguidores de Fujimori que tanto acusan de crímenes a García, cabe recordar que el ex-mandatario García se salvó de la acusación constitucional gracias a los votos de los parlamentarios fujimoristas al lado de los apristas ¡¡Dios los cría y ellos se juntan!!

En fin, que este artículo del abogado chileno lo quería usar como una base para que reconsideremos algunas cuestiones sobre los Derechos Humanos y el poliquiteo, no como un recuerdo de los ochenta. En el mismo se relata cómo compañeros del partido Socialista (que en Chile luchó muchísimo contra las violaciones de Derechos Humanos por parte de la Dictadura, que, a fin de cuentas, en sus filas las contaban como muertos y desaparecidos), defensores de la causa de los derechos Humanos, le pedían solidaridad entre socialistas para no proseguir con la querella contra García, le recordaban la necesidad de buenas relaciones Chile Perú, en conclusión, pedían que girase la cabeza ante las violaciones por cuestiones políticas.

No. No y no. Y ahí le doy un gran punto a este abogado y militante socialista, los derechos humanos están por encima de todo eso, de las amistades entre partidos, de la idea de seguridad, de las relaciones internacionales entre los países, no se puede dar la mano al violador por mejorar el intercambio económico (aunque sea práctica común entre los países, sólo con ver Kuwait o Arabia Saudita y la gran relación que mantienen con occidente vemos buenos ejemplos de esto).

No porque el violador sea del mismo color político (sea de izquierda o derecha, eso acá da igual) se le deben perdonar las violaciones, no porque sea el jefe de un país se debe mirar para un lado, no porque se quiera preservar algún bien jurídico (inferior a los derechos humanos en abstracto) se puede violar los derechos de algunos, no, no y no. Los derechos Humanos no están sometidos a consideraciones utilitaristas de ningún tipo.

Y esto, simplemente, no es negociable.

Hay que ser claros y coherentes cuando defendemos esos derechos humanos, podemos ver cómo resolver situaciones de colisión entre derechos, pero no podemos subordinarlos a otras cuestiones.

(Etiquetas de Technorati: Derechos Humanos, Roberto Ávila, Alan García, violación, impunidad).

Un comentario en «Derechos humanos y contingencias políticas.»

  1. hola jomra…un gusto saludarte
    si pues socio se me paso poner ese dato, soy profesor de razonamiento verbal aca en Peru y me gusta que mis alumnos lean articulos interesantes y no se queden con los estupidos textos memoristicos y de datos, que ponen en los examenes de admision.
    Lastimosamente por aca los escolares y preuniversitarios estan poco interesados de buscar, en internet, lecturas, ensayos y opiniones de los diversos temas que hay. Asi que en mi blog (el cual todos mis muchachos lo tienen) les mando a leer un articulo cada semana para que lo discutan con sus compañeros y conmigo, asi de alguna manera, trato de inculcarles que aprendan a pensar, opinar,criticar y sustentar sus ideas. Esa es su evaluacion.
    Creeme que ya les ha empezado a gustar, ya que a todo adolescente no le gusta quedar mal ante sus compañeros, empeñandose en buscar informacion y opiniones para rebatirlos en clase. Si es que hay algun problema en pasar tus textos, no mas escribeme ya que soy conciente que tienes todo el derecho a reclamar por tus textos, adios.

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