Un pequeño espacio para la expresión, el debate, y hacer bulla… sobre todo mucha bulla.
Por el día de la paz en D=a= Delicias preparamos un podcast sobre estos temas, con aportaciones variadas (contando un testimonio desde Cabo Delgado en Mozambique, zona en que existe un conflicto activo bastante duro o la de Pozzi sobre la OTAN o las de Kotler sobre los conflictos de Ucrania-Rusia y Palestina-Israel, entre otras). En fin, les invito a seguir este enlace y escuchar el audio.
Normalmente no comparto este tipo de cosas, pero esta vez es bastante especial. En Red Delicias hemos trabajado contrarreloj (como siempre) para sacar un podcast especial. Desde D=a= Delicias realizamos todo el montaje y esas cosillas… bueno, acá les dejo el bicho ese (que hasta cuenta con versión con vídeo para poder moverlo en más ámbitos):
Siga leyendo…En Perú se criticó mucho al gobierno venezolano por no renovar a una cadena de televisión crítica con el gobierno, ahora pasa en nuestras tierras, el Ministerio de Transportes y Comunicación (MTC) de la república ha cancelado la licencia de funcionamiento de Radio La Voz. ¿La razón del MTC? Pues que los equipos no estaban homologados (aunque desde la radio se defienden diciendo que ellos solicitaron la inspección y el MTC la hizo larga). ¿La razón real? Es una de esas «radios molestas» para el Presidente de la República, el mentiroso Alan García, es de las radios del Amazonas que informaron de lo que estaba pasando en Bagua cuando se dio la represión del pasado viernes 5… Ya llevaban tiempo queriendo acallar a las «radios díscolas», La Voz es otra víctima más (no es la primera radio local con problemas de este estilo).
(La Guerra de los Mundos, emisión de RNE3 del guión de Orson Wells en que adaptó la obra de HG Wells del mismo nombre -30/10/2008, 1 hora de duración-.)
Tal día como hoy, hace 70 años, Orson Wells emitió por la radio (CBS) una adaptación de la obra de Herbert George Wells «La Guerra de los Mundos» (de 1898), y causó tal impacto que, diciéndolo en claro, la gente tragó con la historia y el terror se expandió entre unos radioyentes que sí dieron crédito a la invasión extraterrestre novelesca de nuestros vecinos del cuarto planeta. El poder de los medios sin querer queriéndolo quedó patente, lo que todos ya sabían fue, hasta cierto punto, parodiado por ese falso noticiario, que resultó tan creíble que los neoyorquinos sufrieron realmente una invasión, al menos la ansiedad que produce la misma.