Hay que ver las cosas que tiene esto de la vida. Alonso se ha llevado una buena victoria (pdf) en la primera vuelta de las elecciones de la Universidad de Salamanca (USAL) en unos comicios con una abstención bastante alta (aunque en la universidad es bastante habitual que no vaya a votar ni tato). Entre el colectivo con peso la victoria fue para el que todos sabíamos, para Battaner. Así pues, muchos pensamos que eso decidiría las elecciones. Pero los descontentos se volcaron con Alonso.
Imagen: Gabinete de Comunicaciones de la USAL (pdf)
En el anterior mensaje sobre estas elecciones me quejé del mal reparto del poder dentro de los colectivos universitarios, y aunque mantengo dicha apreciación, esta vez podríamos decir que son los estudiantes quienes han decantado la victoria para un candidato de forma bastante clara. Quienes también han mostrado la necesidad de cambio es el personal Administrativo de la universidad al lado de los Profesores Titulares de Escuela Universitaria no doctores, Profesores Eméritos, Profesores Contratados doctores, Profesores Ayudantes Doctores y Profesores Colaboradores (colectivos totalmente abandonados por el actual equipo rector). Recordemos que el año pasado los profesores Contratados se declararon en huelga y todo (acá eso no es normal). Lo increíble es que el maltratado sector de los profesores asociados y visitantes votara por Battaner de forma mayoritaria.El colectivo con más poder (tanto en ponderado del colectivo como en poder por persona) decidió que eso de cambiar no era lo adecuado, y votó en favor del actual rector de la USAL, así pues, los profesores Funcionarios docentes (51% del coeficiente) se mostró bastante dividido, pero votó, mayoritariamente, por Battaner (354 para Battaner, 311 para Alonso y sólo 244 para Merchán).
El gran perdedor de los comicios ha sido Merchán, que, salvo entre los alumnos y ayudantes, quedó en tercer lugar en la mayoría de colectivos. Y en algunos casos bastante lejos del segundo.
Los alumnos de tercer ciclo (posgrados y doctorados) votaron de forma aplastante por Alonso, junto con los alumnos de primer y segundo ciclo (diplomaturas, licenciaturas, ingenierías y demás). El 56% de los alumnos de Primer y segundo ciclo votaron por Alonso, el 29.44% apostaron por Merchán y el 8.69% se equivocaron y metieron en el sobre la papeleta de Battaner. Por su lado, los alumnos de tercer ciclo apostaron, en un 63.99% por Alonso (repito, 63.99%), un escaso 18.24% introdujeron la papeleta de Merchán y un menguado 15.32% apostaron por el continuismo de Battaner. Si metemos a todos los alumnos en el mismo saco tendríamos un apoyo para Alonso del 56.65%, Merchán en segundo lugar con el 28.57%, Battaner se hubiera quedado con 9.2% de votos. Si los alumnos tuvieran un poder real en la universidad, relacionado con su número, Alonso habría vencido en primera vuelta sin necesidad de ir a segunda vuelta y Battaner jamás tendría oportunidad de repetir mandato.
Con los datos provisionales, si cada votante tuviera el mismo poder y no existieran los ponderados de marras, tendríamos que el 51.54% de los electores de la USAL se decantaron por Alonso, Merchán en un triste segundo lugar con 25.788% de los votos y Battaner, que con el sistema ponderado irá a la segunda vuelta, se hubiera quedado con un triste 16.919% de votos.
¿Qué previsiones se pueden hacer para la segunda vuelta? Por un lado, si Battaner tuviera un poco de moral, debiera abandonar la carrera a Rector y admitir la falta de apoyo que tiene su mandato, que si no fuera por el alto ponderado de algunos miembros de la comunidad universitaria no estaría en segunda vuelta.
Pero ya que dudo que Battaner abandone la carrera para repetir mandato, seamos un poco serio: La vez pasada Merchán dio su apoyo a Battaner (a cambio de la dirección del Instituto de Neurociencias de Castilla y León), esta vez podría ser igual. Pero claro, vemos que los colectivos más numerosos no quieren votar por Battaner (entre los estudiantes quedó patente), y teniendo en cuenta que los colectivos universitarios (hasta los de derecha) han hecho campaña contra un rector que no se ha parado a escuchar a los estudiantes, es dudoso que los votos de Merchán en dichos colectivos (lo que se traduce en casi seis puntos en el sector 6 y casi un punto entero en el sector 5) se traspasen de forma sencilla a Battaner. Entre los Profesores Funcionarios parece que el apoyo a Battaner crecerá, pero no sería suficiente para darle la victoria.
En cambio, Alonso debe convencer a los estudiantes para que le mantengan el apoyo y ganarse a los votantes de Merchán (claramente descontentos con Battaner), a la par que debe convencer a los profesores de que Battaner es más de lo mismo, y que si votaron por Merchán es que en Battaner no veían solución alguna a nada. No necesita convencer a demasiados, si se gana a los alumnos rozará el 50% asegurándose, prácticamente, la victoria en los comicios del 1 de marzo (la segunda vuelta).
Ausentismo electoral:
De un universo electoral de 32.805 han votado unas 8050 personas (el 24.53% del total), distribuyéndose de forma dispar el ausentismo. Entre los alumnos se dió la mayor brecha. De los 27.753 estudiantes de primer y segundo ciclo sólo votaron 4.925 (17.74%), en el tercer ciclo casi el 16% de los alumnos votaron (411 de 2579 -hay que tener en cuenta que no todos los alumnos de tercer ciclo viven en la ciudad, y son pocos los que piden el voto por correo, que en estos números, si mal no recuerdo, no se cuentan aún-).
Los Profresores Funcionarios Doctores, el grupo con mayor poder (el 51% del ponderado) sí acudió masivamente a las urnas, con una asistencia modélica de más del 90% del total de profesores Funcionarios Doctores (esto es, votaron unos 962 de 1064). Así da gusto, si algo se puede decir de este colectivo, es que se toman en serio las elecciones (claro que son el colectivo mejor tratado por la ley al otorgarle tan alto coeficiente, así cualquiera cree en las instituciones).
Véase también:
- Elecciones para rector de la USAL en De igual a Igual.
Un comentario en «Alonso gana: La venganza del alumnado»