El proyecto para instaurar en Perú por fin el Voto Voluntario (o voto libre o voto facultativo) ha sido archivado con la mayoría de votos en la comisión de Constitución y Reglamento del Congreso de la República con argumentos tan absurdos como que el voto voluntario «pondría en juego la legitimidad del sistema» o que la ciudadanía no está preparada para decidir si va a votar o no. ¿Cómo es posible que no estemos preparados para tomar la primera decisión en todo proceso electoral pero sí para elegir al que mandará?
No le tenía mucha confianza a este eterno proyecto en comisión (o en recurrentes proyectos y promesas, desde el 2001 cuanto menos), pero en abril se dijo que sería el Pleno del Congreso de la República quien decidiría sobre esta importante materia. Ayer lunes la comisión, gracias a los votos contra el proyecto provenientes de UPP, el Partido Nacionalista, Unidad Nacional y los fujimoristas, archivó el proyecto de reforma constitucional (del artículo 31 de la Constitución Política de 1993).
Más abajo está el manifiesto a favor del Voto Voluntario, no me extenderé sobre el mismo, sólo quiero aplaudir la valentía de quienes votaron a favor del voto facultativo, entendiendo siempre que representa un avance en los derechos políticos de los ciudadanos. Votaron a favor: Javier Velásquez Quesquén, José Vargas, Javier Maximiliano Alfredo Hipólito Valle Riestra Gonzáles Olaechea (esta se la apunto entre sus pocos actos positivos) y Carlos Torres Caro (los tres primeros del APRA, el cuarto, del Grupo Parlamentario Especial Demócrata, que además fue quien presentó el proyecto de reforma constitucional 01953/2007-CR).
En contra votaron, como se ha dicho, el resto de grupos parlamentarios. Que desde el fujimorismo representado en Santiago Fujimori, que de demócrata tiene más bien poco, se diga que el sistema perdería legitimidad ampliando, a fin de cuentas, los derechos políticos de los peruanos, al igual que Martha Moyano, también fujimorista, vote en contra del proyecto, lo mismo que Santiago.
Tampoco me extraña (aunque sí lamento) que Edgar Reymundo y Víctor Mayorga, del Partido Nacionalista, vean pérdida de votos en esta norma y por ello voten en contra de una necesaria reforma. No entiendo el motivo de Aldo Estrada (de UPP) para votar contra la medida.
Pero no explicación alguna que tanto Javier Bedoya de Vivanco como Raúl Castro (ambos de Unidad Nacional) voten en contra de la medida, en tanto que ambos presentaron un buen y fundamentado proyecto de reforma constitucional y legal (de la Ley Orgánica de Elecciones, Ley 26859) para conceder a los peruanos el voto facultativo (01559/2007-CR). No tiene sentido que hace ocho meses presentaran un proyecto en la línea del hoy archivado.
Raúl Castro manifestó, ayer, que «la realidad del sistema democrático es que no está constituido a base de personas sino de partidos políticos», argumento que nada tiene que ver con el voto voluntario u obligatorio, y que va en contra del texto en que él figura como autor presentado hace menos de un año. Dudo mucho que la situación peruana haya cambiado tanto como para que ahora no se pueda defender el voto voluntario y hace ocho meses sí.
La actitud de Raúl Castro y Javier Bedoya de Vivanco debe ser explicada y fundamentada, y deben dejar claro por qué figuran como autores de una norma que pretende el voto facultativo y votan en contra de otra que pretendía eso mismo con argumentos contrarios al voto facultativo. Un poco de coherencia, por favor.
Aprovecho para colgar, otra vez, el manifiesto de la plataforma por el Voto Voluntario YA en Perú:
Es increíble que en estos tiempos, la Constitución Política del Perú siga recogiendo la OBLIGACIÓN de votar. El artículo 31 en su párrafo 4 reza «El voto es personal, igual, libre, secreto y obligatorio hasta los setenta años. Es facultativo después de esa edad.»
La democracia, en níngún caso puede existir si se obliga a Votar, aunque con ello se intente garantizar el derecho a elegir, ya que de esta forma, el voto, objetivo primordial del deber de sufragar, siempre va a estar ensombrecido por el hecho de ser obligatoria la votación.
Por ello, desde esta página se pide que el voto sea un Derecho, en toda su extensión, comenzando por la decisión de Votar, y terminando, como no puede ser de otra forma, con la elección de por quién o qué votar.
Nuestra democracia queda completamente desvirtuada desde el origen de la misma. Obligando a la participación no se consigue más que un odio hacia las instituciones del país, comenzando porque a ninguno nos gusta hacer nada obligados, continuando porque la participación en cualquier tipo de actividad debe ser voluntaria, entendiendo que participar en la vida pública, aunque sea dando un voto en unas elecciones, debe nacer de la persona, y no de una obligación constitucional. Además, no podemos esperar que el voto sea «libre» ni reflexionado mientras no podamos asegurar que quien no quiere votar no tenga que hacerlo.
El bien que intentan proteger es la participación ciudadana, pero ¿cómo fomentas que la gente participe si usas la coerción del Estado para hacerlo? ¡¡No puede ser!! Ésta es una medida que se ha mostrado ineficiente, que no crea más que descontento, y que permite la fácil manipulación de la voluntad popular. No es una cuestión de partidismos, es una cuestión de Derechos, de poder decidir desde el inicio.
Desde acá protestamos, de la forma más sencilla, de la forma más clara, poniendo el logo de la campaña en nuestros sitios. Queremos dejar claro nuestro deseo para que las cosas cambien, para que esos legisladores a los que votamos nos hagan caso por una vez. Sabemos que esto no solucionará los problemas del país ni mucho menos, y tal vez muchos crean que es una tontería, pero no podemos mantenernos pasivos mientras que un grupo de sujetos nos obliga a Votar…
Así pues, si usted quiere sumarse a la campaña sólo tiene que poner alguno de los siguientes logos en su Sitio en internet (sea portal, bitácora, foro, lista de distribución, etc.); si no tiene un sitio donde colocarlo, siempre puede pedirle al administrador de sus sitios preferidos que se sumen a la presente campaña, o usarlo como «avatar» en el mesenger, o como firma en su correo electrónico.
Fuentes:
- «Proyecto sobre Voto Facultativo fue archivado» página 4 del periódico Perú21 del martes 27/05/2008
- «La Comisión de Constitución del Congreso rechaza voto facultativo» El Comercio.
- «Voto voluntario, sistema bicameral y renuncia de congresistas pasarán al Pleno en mayo» (PDF) de Andina (sacada de la página de información periodística de la Comisión de Constitución).
Proyectos:
- 01559/2007-CR presentado por Unidad Nacional
- 01953/2007-CR presentado por el Grupo Parlamentario Especial Demócrata
Hola Jomra!!!
Es un tema super complicado… siempre me he considerado a favor del voto libre (por algo estoy suscrita a la campana, ja!) Sin embargo, no sé xq ahora no lo tengo tan claro…
Estaba hablando con una amiga de mi clase acerca de eso y me dijo que a ella le parecía mejor el voto obligatorio, porque de otro modo, los pobres y menos educados (que son los que por obvias razones participan menos) quedan excluidos de la oferta partidaria. Es decir, los partidos políticos apuntan a obtener votos y para ello se dirigen a su «público objetivo», que son los ciudadanos que libremente participan. ¿Qué pasa entonces con los que se mantienen al margen?, ¿por qué algún partido político se preocuparía por ganar sus votos si estos ciudadanos no van a votar?
Claro, nuestro caso es el opuesto… justamente porque es obligatorio los partidos se aprovechan de eso y compran el voto de la gente menos informada, con discursos baratos y estrategias populistas…
De todos modos es una pena que la propuesta ni siquiera haya salido de la Comisión!! y a la verdad es que a este proyecto no le tengo nadita de fe!!!
Saludos Karinam :)
En realidad no creo que la transición entre un sistema de voto obligatorio a voto libre sea «tranquila», en tanto que pueden pasar dos cosas: La gente no se entera que es voluntario y sigue asistiendo pensando que es obligatorio, o asisten por pura inercia, y se puede producir lo que indicas, que dejen de ser un público objetivo en las campañas.
Ahora bien, esto puede ocasionar o un verdadero divorcio entre la sociedad civil y los partidos, o que los partidos bajen a la tierra y busquen a sus electores. A fin de cuentas, hay zonas donde la pobreza alcanza el 85%, si quieres ganar ahí, tienes que apuntar a ese público y darles una propuesta programática de por qué eres mejor para ellos (y no por qué el resto son peores)
De todas formas, sobre el archivo del proyecto y la razón para el mismo (y el porqué le tengo poca fe a que salga adelante), me robo unas palabras del catedrático J.R. Montero Gibert (referidas al sistema electoral en su conjunto), que enlaza también con tu «justamente porque es obligatorio los partidos se aprovechan de eso y compran el voto de la gente menos informada»: «Se trata además de una decisión que toman los políticos elegidos por el mismo sistema electoral que pretende reformarse. No es extraño, por lo tanto, que quienes se han beneficiado de un determinado sistema se opongan, con mayor o menor vehemencia, a la adopción de alteraciones que acaso les perjudiquen en las próximas elecciones» (aquí puedes ver el artículo)…
De todas formas, tampoco es «tan cierto» que las clases medias y altas vayan muy informadas a la cita electoral, recuerdo mis tiempos en transparencia (ya hace años) como informador, el mismo día de las elecciones se nos acercaba gente en un distrito de clase media limeño preguntando que quiénes se presentaban, y qué proponían, que no tenían el voto decidido ni mucho menos, ya que ni sabían de qué iba todo ese tinglado.
Ya para acabar (que me extiendo innecesariamente), me fastidia muchísimo que se argumente que somos una sociedad inmadura (más que todo porque si podemos elegir al que manda, debemos poder elegir si vamos a los comicios, es de cajón) o que el sistema perdería legitimidad (¿es legítimo obligar a la gente a votar?)…
Hasta luego y gracias por el comentario ;)
PD: Sobre la campaña (qué vergüenza) ¡¡tenemos que actualizar esa web!! Lo sé lo sé :P