Rajoy e inmigración irregular

«Llevo cuatro años viviendo en España, de forma ilegal, soy un padre, de dos hijas, y siempre las he mantenido, trabajando en lo que me salía, yo llevo viviendo de las ayudas de las personas de la Iglesia católica y de la Iglesia evangelista, siempre he trabajo en lo que me sale, sin ningún derecho, porque no encuentro a nadie que me haga un contrato para poder ser legal. Con mis esfuerzos el año pasado solicité los papeles, permiso de residencia y de trabajo, me denegaron los papeles porque la mujer con la que trabajé y encima me cobró dos mil euros, me ofreció un contrato falso, somos muchos los inmigrantes que estamos en esta situación tan dramática, y por miedo a denunciar porque dicen que nos van a repatriar. Señor Rajoy: ¿Qué hará por emigrantes como nosotros, que estamos sufriendo?»

Preguntó Enric Joseph Mboa Mboa. Y Rajoy no contestó. Bueno, hizo un amago de respuesta que no fue tal, le dio ánimos y adelante compañero. Personalmente creo que fue la mejor pregunta de todo el programa de «Tengo una pregunta para Usted» donde se entrevistó, en ese particular formato televisivo del apanado ciudadano, al líder del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy.

El líder popular comenzó a contar la historia del pueblo gallego (sin recordar que mucha gente migró ilegalmente), para luego defender el «orden» para la inmigración, con «sentido común», básicamente dijo que vengan los que tienen trabajo (insisto, olvidándose de cómo los gallegos, y el resto de españoles, salieron sin contratos y de forma irregular a buscarse los frijoles fuera de una tierra deprimida y en dictadura).

Para concluir la respuesta, terminó diciendo:

«Siga buscando trabajo, las cosas van a mejorar, usted es un hombre joven, no puede arrojar la toalla, esto va a mejorar en el futuro. (…) Aquí no puede venir todo el que quiera sin ningún control, las cosas necesitan un orden.»

Ánimos y orden. Pero no contestó a lo que se le preguntaba.

No respondió qué haría el PP con los inmigrantes irregulares. Ahora se niegan a aceptar cualquier tipo de regulación masiva (como la hecha por el PSOE cuando asumió el poder o la anterior del PP). ¿Qué va a pasar con los inmigrantes irregulares cuando el PP tome el poder? ¿Qué pasa ahora con ellos? El proceso para la regularización de un inmigrante irregular (y para mantener el estatus de regular) pasa por tener un contrato de trabajo, y para ello se debe encontrar un empresario dispuesto a hacer uno como dios manda, y eso no es tarea fácil (ni ahora ni antes).

Los que contratan trabajadores irregulares lo hacen porque los mismos no tienen derechos, se les explota y paga menos que a los regulares (sean o no inmigrantes), los que contratan trabajadores suelen preferir que los mismos ya tengan papeles, el lío burocrático para, en ciertos sectores, contratar a un inmigrante irregular y permitir su regularización les echa para atrás, y hay mucho empresario suelto que COBRA al trabajador por el contrato. ¡COBRA! Y eso no se denuncia. Lo comentó el propio Enric Joseph Mboa Mboa, le estafaron dos mil euros y él continúa en situación irregular.

Es un círculo vicioso, si tienes trabajo te regularizan, para tener trabajo hay que estar de forma regular (salvo raras excepciones de empresarios que sí sabe qué es estar necesitado y realizan los trámites y demás).

El Partido Popular viene pidiendo expulsiones masivas, más de una vez han declarado que algo hay que hacer con los inmigrantes irregulares que hay en España, no dicen el qué, pero ya que sí recuerdan que la solución no es regularizarlos, la otra opción sería expulsarlos (o no hacer nada, situación que conviene especialmente a los empresarios que explotan trabajadores irregulares).

El PP, y la derecha europea a la que pertenece, van camino a la criminalización del inmigrante «sin papeles», y a quienes les ayudan (¿es ayudar ofrecer un contrato de trabajo a un ilegal? Miren que acá tenemos dos iglesias cristianas ayudando a este sujeto), y esta visión cada vez más la comparten partidos como el PSOE (mírese el último proyecto de reforma de la ley de extranjería).

Rajoy, tan duro en el tema de la inmigración irregular, no se atrevió a decir a la ara de un inmigrante irregular lo que seguramente piensa: A ti, y a los tuyos, hay que expulsarlos de España. Aquí se viene con trabajo, y cuando ya no lo tengan, se van a sus países de vuelta.

(Excurso: Hablando de eso, el gobierno del PSOE se niega a retocar la legislación vigente para que los trabajadores inmigrantes regulares que se queden en el paro y, entre periodo trabajado y el de la pensión de desempleo, no consigan reunir esos seis meses, puedan renovar el permiso de residencia, así que ojo, que estamos a las puertas del aumento de irregulares porque muchos de los regulares dejarán de serlo, sobre todo esos que consiguieron la residencia por su trabajo en la construcción y son los primeros despedidos.)