La publicidad es el mundo de la mentira. No de «endulzar la realidad», sino de la burda y directa mentira. ¿Cómo se puede declarar «navega sin límites» mientras las condiciones a pie de pantalla (esas «obligatorias» que dan las condiciones reales de contratación para que con la publicidad no se les obligue a ofrecer lo que prometen pero no piensan cumplir) se lee «límite de consumo de 500MB/mes». ¿No les parece contradictorio decir «tarifa plana», «sin límites» y a la par marcar un bajo límite de consumo? ¡Es peor que las antiguas tarifas planas de la época de los modem de 56kbs, al menos en esas tarifas ondulares no había límite de descargas -más allá del límite de la propia banda-!