Ya para acabar con este «resumen-crítica» de la reforma Laboral aprobada mediante Real Decreto-Ley 3/2012 queda realizar una valoración global de la reforma (I, II, III, IV y V). Lo primero que me viene a la mente es la lentitud con la que las principales centrales sindicales deciden si realizar una Huelga General. Por menos que esto fuimos a la calle en el 2010 (tarde y mal, pero fuimos, esa tardanza también fue responsabilidad de los sindicatos mayoritarios, de sus direcciones, que desconocieron el clamor de sus bases y del resto de los trabajadores). CC.OO y UGT, por lo visto, están barajando dos posibles fechas para la Huelga General, pero en realidad no definen si finalmente la convocarán o no. La otra duda que tengo es si el gobierno se está riendo en nuestra cara, la de todos los trabajadores, cuando afirma cosas como: «Esta es una reforma en la que todos ganan, empresarios y trabajadores, y que pretende satisfacer más y mejor los legítimos intereses de todos» (exposición de motivos del RDL 3/2012, 8º párrafo in fine).