Todos contra la subida abusiva de tasas

Lanzarote, los vecinos no queremos pagar los favores a tus amigos.

publicado originalmente en DeIgualaIgual

A finales de octubre el grupo popular del ayuntamiento de Salamanca, aprovechando su holgada mayoría absoluta en el consistorio, aprobó una subida de tasas totalmente abusiva. Pagar impuestos es, hoy por hoy, necesario, pero no se puede imponer tamañas subidas a los ciudadanos de a pié con impuestos y tasas nada progresivas o justas mientras se perdonan las deudas de los amigos constructores (una serie de multas que el ayuntamiento olvidó cobrar -y prescribieron- a promotores amigos del alcalde, cuya suma total casi alcanza los 20 millones de euros). Salamanca tiene un déficit presupuestario bastante grande gracias a la mala gestión de un alcalde que no duda en subirse el sueldo y condonar deudas millonarias mientras que exprime a los ciudadanos. Por eso hoy los ciudadanos de la capital charra hemos salido a la calle a protestar.

La Federación de Asociaciones de Vecinos de Salamanca (FEVESA) convocó para hoy una manifestación frente al ayuntamiento. Dicha convocatoria fue respaldada por todos los sindicatos, las asociaciones de estudiantes de izquierda, las demás asociaciones de vecinos de Salamanca y, en solidaridad, de otros pueblos de la provincia, la casi totalidad de partidos en la oposición, tanto el que está en el ayuntamiento como el resto de fuerzas que no tienen representación institucional. Y eso, hoy, en la plaza mayor se notó. Una plaza totalmente abarrotada de ciudadanos que no dan su brazo a torcer.

«No a la subida de tasas abusiva»

Distintos gritos se escucharon con fuerza en la Plaza Mayor, desde el «arriba las manos, esto es un atraco», hasta los dirigidos hacia el alcalde en particular como fueron «esto nos pasa por tener un alcalde facha», «Lanzarote date el bote», «no queremos pagar los favores a tus amigos constructores», «Lanzarote no nos representas», «nosotros no tenemos coche oficial» y, por supuesto, los cánticos referidos a los impuestos en sí. No faltaron las referencias a una polémica entre el oficialismo y el presidente de FEVESA, a quien no dejaron entrar al pleno municipal en el que se aprobaron la subida de tasas alegando que no estaba vestido correctamente.

«Luego dirán que somos cuatro o cinco»

Se gritó ese lema recordando otras manifestaciones contra el alcalde, siempre ninguneadas por un personaje que recuerda más a los caciques de antaño o a los gobernadores civiles durante el franquismo que a un alcalde democráticamente elegido. Según la policía municipal fuimos 14 mil personas las que abarrotamos la plaza mayor, según los convocantes, unos veinticinco mil. Sea como sea, la Plaza Mayor se vistió de todos los colores y banderas para pedir una rectificación por parte de un alcalde cuya gestión está hundiendo a esta pequeña ciudad castellano leonesa. Obviamente, el alcalde Julián Lanzarote ni se acercó al ayuntamiento.

Trabas y más trabas

Los convocantes de la marcha han puesto de manifiesto la cantidad de trabas que el consistorio ha puesto a la marcha ciudadana, ni siquiera se les ha dejado recoger firmas en la Plaza Mayor, ni repartir volantes, ni poner carteles en la Plaza ni, por supuesto, leer el manifiesto de la marcha desde el consistorio, prácticas que se han realizado en las marchas y actividades convocadas o por el alcalde o por su partido político. En Salamanca se vive, como en otras ciudades españolas, un doble rasero en cuanto a lo que se puede hacer y no se puede durante las manifestaciones, cuando son a favor de las ideas del poder político que manda, todos los favores y facilidades son pocas, cuando son del signo contrario, poco falta para que manden a los antidisturbios.

Durante la concentración en la Plaza Mayor se intentó acceder al ayuntamiento para leer desde el balcón el manifiesto, previamente se había permitido, por parte de las autoridades, el ingreso de periodistas gráficos al balcón de la Casa de todos para que fotografiaran la marcha ciudadana, cuando el ingreso lo pidieron los distintos presidentes de las asociaciones de vecinos de la capital charra la respuesta fue cerrar las puertas del ayuntamiento.

El desarrollo

La concentración central en la Plaza Mayor fue convocado a la 1 de la tarde, previamente distintas asociaciones de vecinos convocaron marchas desde sus barrios hacia el centro de la ciudad, así pues, desde San José, Garrido Sur, Barrio Blanco-Pizarrales, entre otros, partieron las marchas ciudadanas en un paso reivindicativo hacia la puerta del ayuntamiento. La lectura del manifiesto oficial se hizo algo más tarde de lo anunciado ya que las distintas marchas desde toda la ciudada no terminaban de llegar, y cada vez que un colectivo entraba a la Plaza los que ya se encontraban en la misma rompían en aplausos y gritos contra la subida abusiva de tasas.

El manifiesto

Como no podía ser de otra forma, el manifiesto intentó recordar las «7 plagas de Lanzarote», esto es, la brutal subida de las tasas, en las cuales la recogida de basura sube un 35%, el IBI un 19%, las plusvalías hasta un 34.6%, la depuración de agua en un 13.7%, el bonobús casi duplicará su actual precio… El manifiesto recordó que estas subidas, no anunciadas por Lanzarote cuando se presentó a la reelección a alcalde hace pocos meses, se realizan por la mala gestión municipal, donde no se gasta donde se debe y se gasta mal normalmente, sin contar que el ayuntamiento tiende a «no cobrar» a las constructoras amigas que deben, literalmente, millonadas al ayuntamiento, y el municipio está perdiendo, últimamente, muchos juicios por lo mal que hace las cosas en materia urbanística, y aún el consistorio no tiene un abogado en plantilla, así que debe recurrir a la defensa legal por medio de costosos despachos de abogados incapaces de arreglar durante los juicios lo que el alcalde y los suyos hacen mal en su trabajo.

El Alcalde de Salamanca en vez de hacer las cosas bien ha decidido robar a los salmantinos que pagan religiosamente todas las tasas. Julián Lanzarote, cacique de Salamanca, premia a las empresas de sus amigos que no pagan lo que deben y castiga a los ciudadanos.