Aunque la tira se refiere al tijeretazo del gobierno, vale igual para la reforma laboral que nos viene encima.
Se rompió el Diálogo Social. Otra vez. Y ya van… Pero esta tiene algo distinto, el último mes y medio ha vivido amenazada por el gobierno de España, que le ponía plazo de entrega o de reforma pactada se iría a reforma por decretazo (permítanme dudar de la constitucionalidad, en este caso, del uso del Decreto Ley por falta del requisito de «Urgencia», como pasó en el 2002). Era curioso ver cómo se desarrollaba la negociación, el gobierno se sumó (desde abril) a las principales tesis de la patronal (que ni siquiera cree que la reforma creará empleo, ellos piden financiación, pero bueno, si cuela, cuela), así amarró las manos a los sindicatos, su negociación se volvía la necesidad de encontrar la menos mala de las reformas pedidas por la patronal, pero era aceptar que los trabajadores pagaríamos la crisis que los empresarios ocasionaron. El mejor resumen lo da Vergara en su tira de hoy en Público.
Desde las patronales se ha acusado a los sindicatos de no querer acuerdo. ¡Qué fácil es vivir con la red de seguridad que da un gobierno que te respalda! Sin acuerdo, el gobierno legisla como quiere la patronal. Con acuerdo también. Pero son los sindicatos a los que se presenta como que no ponen el hombro. Qué bien. Qué fácil. Qué útil.
Casi que mejor. Todas las reformas laborales pactadas (y las no pactadas) han ido en detrimento de: a) el poder negociador de los trabajadores (dando más poder a los empresarios); b) la flexibilización de las condiciones de trabajo (dando más poder a los empresarios); c) precarización del empleo (incluso cuando la letra de la ley iba por otro lado, dejaba tal puerta abierta a una ineficaz negociación colectiva que por convenios se empeoraba, y mucho, la situación anterior). Todo nos conduce a la individualización de las relaciones laborales, por tanto, a que el empresario (parte fuerte de la relación) pueda imponer más fácil su voluntad, como se dedica a señalar hasta con cierta pena la profesora de Sistemas de Relaciones Laborales.
Ante ese panorama, y a sabiendas que la «reforma laboral» pedida por patronal y «los mercados» (que mandan más que los gobiernos, y todo se hace para contentarles) es «más flexibilización» (de entrada, de salida, de condiciones, y de todo lo flexibilizable), así como una mayor «adaptabilidad» de los convenios a las empresas (esto es, que se rompa en gran medida la eficacia normativa -y uniformizadora- de los convenios colectivos supraempresariales en favor de una negociación «en la empresa», algo que ya ocurre pero que se quiere potenciar), creo que es mejor que, si se quiere llevar acabo, se haga sin la participación de los sindicatos más representativos.
No es que sea demasiado amigo de esos dos sindicatos (UGT y CC.OO.), pero son los que tienen, gracias a las elecciones de delegados de personal y miembros de comités de empresas, la representación de todos los trabajadores (una pesada carga), pero si firman una reforma que rebaja mucho los derechos de los trabajadores estaríamos vendidos, no habría huelga general.
La reforma se hará, lo avisan, por sus narices que se hará, las del gobierno y los mercados a los que sirve (representados en parte por la bancada patronal), y sin querer sumarme al «cuanto peor, mejor», sí es cierto que la única forma de que UGT y CC.OO. se movilicen, declaren la huelga general (son quienes pueden) y consigan el apoyo de otros sindicatos (aunque nos podemos ir olvidando de los amarillos del CSI-CSIF, que andan molestos por la huelga de los trabajadores de la función pública), es si no han firmado la reforma.
Si los sindicatos más representativos, los que no han conseguido llegar a acuerdo hasta hoy, firman la reforma finalmente, se garantiza la paz social, esto es, se garantiza que la reforma salga adelante y nos perjudique enteramente (porque mala, lo que se dice mala, será «peor»), aunque el contenido de una reforma pactada pueda ser ligeramente mejor que una impuesta, es más posible reaccionar conjuntamente a una reforma impuesta, y conseguir, tal vez, un mejor contenido de la reforma (siempre malo) en el legislativo, algo que en la pactada, tal como están las cosas, no se obtendría (pocas, eso sí, no nos engañemos, para ejemplo lo del 2002 con los salarios de tramitación, decretazo del gobierno de Aznar, Huelga General, matización del decretazo en las Cortes, sí es cierto que el resultado fue una disminución del costo del despido gracias a la eliminación en ciertos supuestos de dichos salarios).
Pero la huelga general, si sale bien, tiene otro punto positivo: Dejamos claro que seguimos, los trabajadores, estando ahí, y que las calles pueden ser nuestras. Si sale mal, pues la situación seguirá como hasta ahora, el timón lo lleva el capital y atropella a quien quiere y como quiere.
Como saben, soy de los que creen que hace tiempo ya se debió haber convocado una (o más de una) Huelga General, pero nunca es tarde si la agresión continúa, y lo hace.
Excurso: No todo en la reforma será negativo, claro, por ejemplo, si consiguen separar la duración de los contratos de obra o servicio de la contrata entre la empresa principal y la auxiliar, será un paso de gigantes hacia la reducción de la temporalidad (es una de las múltiples propuestas sobre los contratos temporales puestos sobre la mesa por el gobierno)… Pero poco más.
Lo siento Jomra, pero hablar a estas alturas de huelga general es una irresponsabilidad enorme, de echo, a estas alturas, seria inutil. Para salir en condiciones de esta crisis, el Estado español (como cualquier otro estado)debe estar unido, incluidos patronal y trabajadores. Una huelga general a estas alturas, solo serviria para sembrar mas dudas de la capacidad de España para salir de esta crisis. Mas dudas = mas pesimismo = bajada de la bolsa y menor rating = financiación mas cara para el estado = mas recortes = menos inversión pública = mas cierre de empresas = mas despidos = mayor pobreza para todos = menor consumo… etc, etc, etc… .
Lo que hay que hacer es arrimar el hombro todos, y si, mas que nos pese es indispensable abaratar el despido, que por cierto, es algo que en su dia ya trato de hacer Aznar, pero finalmente no se atrevió por el desgaste politico que conlleva.
Lo que no se puede hacer es lo que Rajoy ha hecho: votar en contra de los recortes propuestos por el gobierno, pese a que Sarkozy, Merkel, y Obama le aconsejaron votar a favor, por el motivo ya antes mencionado: mostrar unidad a los mercados internacionales.
Salud Don GereOne
Algo es cierto: Una HG no nos saca de la crisis. Con ese objetivo sería inútil (en esto tiene toda la razón del mundo y parte del extranjero). Pero no se hace una HG con ese fin.
Pero no veo por qué es irresponsable, posiblemente pare menos la producción del país que un Barça-Madrid o que el debut de España en el Mundial (¿por lo que digan los mercados? no son mi dueño). Lo de estar «unidos», no lo veo nada claro, no hay intereses comunes realmente, y cada vez que damos la mano nos toman todo el brazo.
Las extinciones de contratos en España no son caras, según el tipo de contrato es: cero euros (formación, prácticas, interinidad); 8 euros por año (eventuales, por obra o servicio); 20 días (indefinidos), que si es por causas económicas y eres una PYME, se te queda en 12 días (los otros 8 los paga el FOGASA). Lo que cuesta 45 es el despido improcedente, esto es, el que no se ajusta a la ley, y el cual se usa y abusa totalmente. ¿Por qué seguir premiando a las empresas que se saltan a la torera la causalidad del despido?
¿Bajar el coste de despidos crea empleo? Lo dudo mucho la verdad. Cuela que se diga que crea empleo bajar los costes del empleo (sociales, salariales, etcétera), pero no fijándonos fundamentalmente en el coste extintivo (menos cuando es de 20 días, mientras que ahora se reivindica 33 -improcedentes, claro-). Se pasó de un paro más grande que el actual a uno del 8% con estos costes de extinción de contrato (incluso se subió de 0 a 8 para los eventuales y por obra y servicio en el 97 -algo que olvidé poner en el examen ¬¬-). Y se ha destruido el empleo más barato más rápido (el temporal).
Aznar indirectamente sí bajó el coste de las extinciones, más aun, su reforma fue importante teniendo en cuenta el uso y el abuso del despido improcedente, donde el mayor coste venía de los salarios de tramitación (dada la poca duración real de los contratos en España, los salarios de tramitación podían ser muy superiores a la indemnización que pagan las empresas), ahora rara vez las empresas los pagan, gracias al depósito previo de la indemnización por improcedencia.
Lo del PP no tiene nombre no solo por ir en contra de lo que hacen sus socios europeos, sino porque vota a favor de estas medidas en el Parlamento Europeo y en contra a nivel local, lo cual sí es contradictorio. Ahora, porque algo lo hagan otros países no significa que acá debamos hacerlo también (se supone que los alemanes, franceses y demás votaron gobiernos de derechas, y los españoles, casi que no, no tiene sentido que hagan las mismas políticas, sino, ahorrémosnos los votos y demos a la Bolsa el control directo de la política).
El problema es «todo» el sistema productivo y de intercambio de bienes y servicios, con este los trabajadores siempre perderemos, tarde o temprano, pero perdemos. Y una HG no lo soluciona, claro. Pero decimos «acá estamos», y algo hacemos.
Hasta luego y muchas gracias por el comentario ;)
Querido Jomra, voy a proceder a contestar alguna de tus declaraciones:
1º- Dices que los mercados “no son mi dueño”:
Hijo mio, en un mundo globalizado, y en una economía abierta como la española, el mercado financiero no será tu dueño, pero creeme, lo es de tu trabajo y de tu dinero. Por lo tanto si los mercados van mal, a largo plazo, tu también pagarás las consecuencias, (ya las estas pagando).
2º- Dices que no hay “intereses comunes”:
¿No es de tu interés que España salga del pozo en el que se encuentra?
3º- Dices que “Lo que cuesta 45 es el despido improcedente, esto es, el que no se ajusta a la ley, y el cual se usa y abusa totalmente. ¿Por qué seguir premiando a las empresas que se saltan a la torera la causalidad del despido?”:
Te informo que muchas empresas a la hora de despedir a alguien suelen hacerlo por causas económicas o de producción. Lo que pasa es que les sale mas barato pagar esos 45 dias, que, a que el trabajador despedido les denuncie por despido improcedente alegando cualquier causa, y tener que enfentarse al trabajador en los juzgados, con una ley que en caso de duda siempre tiende a favorecer al trabajador, (Además de los costes económicos suma la mala prensa). Todo eso sin contar los casos en los que el convenio colectivo fije una indemnización mayor por despido de lo que marca el estatuto de los trabajadores.
4º- Hablas de que no tiene sentido que gobiernos de derecha y un gobierno de izquierda, como el español, adopten medidas similares ante la crisis:
Mira. Sigue pensando en derechas e izquierdas todo lo que quieras, yo lo que quiero es que mi gobierno saque a mi pais, es decir, a mi, de la crisis económica que estamos sufriendo. Y lo que esta claro es que regalando el dinero público no lo vamos a conseguir, y ahora que por fin se dan cuenta, y emplean medidas medianamente acertadas, sinceramente… ¡¡¡ME IMPORTA TRES COJONES QUE LAS MEDIDAS SEAN DE DERECHAS!!!
5º- Cito textualmente: “El problema es «todo» el sistema productivo y de intercambio de bienes y servicios, con este los trabajadores siempre perderemos, tarde o temprano, pero perdemos”:
Es lo que tiene el capitalismo majete, la otra opción es irse a vivir a Cuba. Compara, y dime con que te quedas.
Hasta luego, y un abrazo.
Salud D. GereOne
Perdone por tardar tanto en contestarle, dudaba si hacer algo más extenso o si valdría con un comentario (diría que breve, pero sufro de verborrea, como ya ve):
1) Son tan dueños de mi trabajo y mi dinero como necesitados de los mismos. Estoy de acuerdo, en todo caso, en la apreciación de lo que supone un “mundo globalizado”, y por ello me opongo al mismo. No voy a aceptar o tragar con todo lo que me echen, y creo que la peor postura es hacerlo.
2) Dudo mucho que eso exista más allá de la simple retórica. El país necesita consumo, y se baten las marcas de ahorro privado, el país necesita que fluya el crédito, y los bancos más grandes, con beneficios gordísimos, compran y especulan con deuda extranjera o compran bancos fuera de nuestras fronteras, pero no arriman el hombro arriesgándose a los créditos a las PYMES, encima, hacen campañas que fomentan la captación de fondos (más ahorro privado). Y así con todo. Puede que se diga, retóricamente, que tenemos fines comunes, pero no es cierto, al menos nuestras acciones contradicen eso.
3) Al menos lo que conozco (experiencias personales, trabajo, y trabajo de amigos y conocidos en el ámbito de la práctica del Derecho) contradice y mucho esa afirmación. Se despide mal y se contrata mal (harto de ver casos que pudieron ser despidos objetivos que se intentan colar como disciplinarios, de extinciones de contratos temporales que son realmente fijos, con lo cual es improcedente el despido, y demás), incluso, muchos ni saben que existe el despido objetivo (a una entidad que le asesoré para amortización de un puesto de trabajo antes le habían dicho que despidiera como disciplinario y si eso, cuando el trabajador reclamara, reconociera la improcedencia sin más, para ahorrarse el juicio). Y no, si eso, se despide bien, y si reclama, se deposita el dinero (sin salarios de tramitación) de la improcedencia, y toda entidad que se precie o tiene un seguro legal o tiene departamento legal.
4) Quitemos las elecciones entonces. Claro que importa qué tipo de medida nos saca, puesto que la economía (el modelo productivo) configura nuestra cultura. Sino contra el paro trabajo forzoso, o asesinatos masivos, o cualquier otra burrada demagógica que pueda poner. Total, nos saca del apuro. ¿O no?
5) Claro que es lo que tiene el capitalismo, por eso no lo apoyo. Y no sea tan binario tampoco.
Hasta luego y gracias por su comentario ;)
Pues ale, ahi tienes tu huelga general. Mejor dicho, la pantomima de los sindicatos. ¿Como se puede protestar contra una reforma laboral, programando una huelga general para tres meses despues de la fecha de aprobación de la ley?, ya se sabe que la ley va a salir si o si, ¿pero de verdad creen que ejercen presión en la negociación de esta manera? Sencillamente no doy crédito.
Lo dicho, ahi tienes tu huelga, disfrutala!!!
[…] que ayer se confirmó el absurdo: Ante la reforma inminente de la legislación laboral, la huelga general será para «después del verano», para el «29 de septiembre» en concreto. ¿Qué esperan los […]