¿Victoria «histórico-social» de Humala? Un sentido al sinsentido.

Desde ayer le doy vueltas a la incoherente frase del líder nacionalista Ollanta Humala, aquella de que ha conseguido una "histórica victoria social y política en este proceso electoral", mientras reconocía su derrota en segunda vuelta, recordaba lo demócrata que es, y que por ello acepta a García como presidente (suerte que alguien lo hace, otros, como el padre del candidato nacionalista, aún no aceptan a Alan, ya sea gracias a las sospechas planteadas por Lourdes o por simple piconería).

Parlamentos

A lo que íbamos, Ollanta Humala ha conseguido una agria victoria parcial, esto es, es el claro ganador en el Congreso, tiene 45 escaños, 9 más que el grupo del Partido Aprista Peruano. También fue el más votado para el Parlamento Andino, aunque por poquito, sacando dos curules al igual que los chicos del APRA (para estas cuestiones, véase el análisis hecho días atrás sobre el nuevo Congreso y el resultado al Parlamento Andino). Así pues, pueden sentirse parcialmente victoriosos en cuanto a los resultados globales, no alcanzaron a la presidencia pero son la fuerza política más importante en los ámbitos de decisión legislativos. Por no decir que son la única fuerza que tiene representantes desde casi todo el Perú (menos Madre de Dios, que repartía un sólo escaño que se lo llevó Restauración Nacional).

Primera vuelta

También podríamos hacer un análisis de la primera vuelta, Humala de lejos se llevó el Perú en el bolsillo, la mayoría de Distritos eran claramente nacionalistas, Lima de Lourdes y la costa Norte, como siempre, del APRA. En el mapa provinsial la cosa es levemente distinta, vemos que la gran mayoría de provincias son humalistas, incluso dentro de los departamentos que acabaron de "otro color", con la salvedad de La Libertad y Lambayeque, cuya totalidad de las provincias son Apristas. 11 Departamentos son totalmente de Ollanta, sin que no haya ninguna provincia de otro partido. En ese sentido, la mayoría del Perú (según territorios) son del PNP, sobre todo si tenemos en cuenta la hegemonía sobre cierta clase social campesina realmente necesitada que ha encontrado en Ollanta la forma de gritar sus necesidades y de reclamar soluciones (esto es, la mentada victoria social). Esta parte no la podemos olvidar.

Ahora veamos la segunda vuelta

(Todo esto al 95% contado) Esta vez la demografía jugó en favor de Alan, cosechó las zonas más pobladas, y con goleada, así pues, ganó donde se deciden las elecciones, en las grandes ciudades, en los grandes territorios nacionales. Como ejemplos cogeremos los dos más grandes, Lima le dio 2 804 167 (el 62.028% de votos válidos del Departamento), La Libertad dio 537 575 votos (lo cual es el 73.259% de los votos válidos), vemos pues como en estas regiones el voto aprista rompe al humalista, y por bastante.

Seguimos con el análisis "partido" del territorio nacional en cuanto al voto (vea los resultados por zonas), 15 de 26 regiones (contando "El Extranjero" como una región propia) votaron mayoritariamente por Humala, vemos cómo en Ayacucho Humala se llevó el 83.533% de votos válidos (lo sé, es un departamento pequeño, pero sociológicamente significativo si queremos ver qué significa Ollanta, aunque nos pese), Apurímac, Huancavelica, y Cuzco dan más del 70% de su apoyo (en votos válidos, siempre) a Humala. Sigue siendo significativo.

Así pues, la diferencia actual entre Humala y García es pequeña (unos 700 mil votos), vale, es más grande que los distritos que he mencionado, pero pequeña en términos globales (un 5% votos emitidos), y menor que los votos nulos y blancos sumados. Si sumamos Lima (sin contar "El Extranjero") y La Libertad, obtendremos que la diferencia entre los candidatos es de 1 428 897, esto es, a nivel nacional Ollanta ha conseguido remontar, más o menos, la mitad de esa gigantesca diferencia. Y hay que ver el peso real de Lima en todo este juego. El Campo es humalista, el Perú, en sus sectores más necesitados, más marginados, y más olvidados, son de Humala con una diferencia tremenda.

Sólo el bastión de la derecha peruana sumada con la casa del APRA han conseguido que García consiguiera una ajustada (más o menos) victoria frente a Ollanta. La victoria en el campo social (en la vida marginada del Perú) sí es de Humala, no es una histórica victoria (esa frase es demasiado triunfalista) pero sí es real como logro propio de un movimiento integrante de ciertos marginados políticos y sociales. Hay que aprender mucho, no de lo que quiere hacer ni de cómo lo quiere hacer (esta es la parte que, personalmente, me preocupa), sino de cómo ha sabido escuchar a la gente y canalizar su malestar en votos, en Departamentos completamente humalistas, de los territorios más castigados por el terrorismo que se juntan con un asesino como el único bien posible, para poder recuperar una dignidad que desde Lima usualmente se les niega.

Esperemos que García sepa leer estos datos, sepa manejar la situación y sepa dar salida a las reformas sociales necesarias para sacar de la marginalidad a la mitad del Perú, concentrado sobre todo en el interior.

(Etiquetas de Technorati: perú, peru, elecciones, humala, apra, upp, ollanta, alan, garcía).
(Gracias a Observador corrijo una errata gorda en cuanto a la curul de Madre de Dios)