Sobre periodismo y baños, que diría Sifuentes

«Antes el poder económico influía en la prensa, ahora el poder económico hace la prensa.»
César Hildebrandt

Mientras leía el bastante sensato artículo de Marco Sifuentes en Perú 21, «La pared de mi baño es más grande que la tuya», sobre, una vez más, la relación de los periodistas con el «comentarista digital», no dejaba de acordarme «malos ejemplos» en la prensa tradicional (lo que él indica como el típico y salido de tono comentario en FB es algo que he visto en portadas de diarios de tirada nacional), a la par que me acordaba de una anotación de Versvs de hace ya un par de años titulado: «Por qué dejar de leer los periódicos es una necesidad inminente» (título que ya es toda una provocación).

Siga leyendo…

RTVE, manipulación y El Mundo

El que dimitió se excusa, no le falta razón cuando afirma que existe un gran cinismo por parte de algunos medios privados a la hora de quejarse de la medida aprobada (y echada para atrás) de permitir a los consejeros de RTVE el acceso (y con ello la posibilidad de manipulación) al dichoso i-News, claro que olvida que no es lo mismo un medio privado que uno público (o no debería ser lo mismo -y no todos los públicos son iguales, como recuerda Escolar-), y evidentemente tiene razón al asegurar que para manipular las noticias no se necesita ese acceso, no se ha necesitado en el pasado ni en la actualidad, pero sí que es una medida que, por lo menos, causa suspicacia. En una tertulia en la Cope, si mal no recuerdo, uno de los periodistas comentaba cómo «toda la vida» les han dictado en TVE la línea editorial «desde la escalinata», ese tertuliano fue un cargo importante en las noticias en época de Aznar, y seguro que ahora algo parecido se hizo durante un tiempo, y así era con Felipe González, pero una cosa, nuevamente, no justifica la otra.

Siga leyendo…

Lo mínimo: Veracidad

Lo mínimo que se le debe pedir a un periodista (a una información tratada de forma periodística) es veracidad, hacer ese esfuerzo para comprobar fuentes y hablar con un mínimo de fundamento, que luego la información es desmentida con otras pruebas o lo que sea, no quita la veracidad conseguida por una diligencia mínima y necesaria para considerar correcta (veraz) la primera información. Ahora, cuando se da información tergiversando y cargándose cualquier principio de búsqueda de la veracidad en la info destinada a ser entregada, cuando se afirma tajantemente algunas cuestiones se debe, por lo menos, se debe tener la certeza de que dicha situación existe, o que el periodista hizo todo lo posible para saber que su afirmación es veraz… que luego no lo sea es otro tema, pero esa diligencia es necesaria.

Siga leyendo…