O cómo darle una patada en la boca a tus protectores ideológicos que te idolatraban y admiraban, incluso porque escribías en El País (en otras palabras, en la prensa del enemigo). Vargas Llosa, el superliberal peruano con pasaporte español (y peruano, maravillas de la doble nacionalidad) se sube al carro de Unión, Progreso y Democracia (UPD), el nuevo partido impulsado por el filósofo antinacionalista Fernando Savater y toda la gente del colectivo ¡Basta Ya! . No lo hace entrando en las listas del partido, sino avalando la plataforma en su presentación. «Devolverá la esperanza en el progreso de España» ha dicho.
Vargas Llosa, aquél que fracasó en las elecciones presidenciales peruanas de 1990 ante Alberto Fujimori (por sus propuestas económicas, y que vió, para más inri, cómo Fujimori apostó por completo por las propuestas del líder derechista y escritor peruano) declaró no sentirse identificado con el conservadurismo del Partido Popular (del cual siempre se le ha encontrado cerca, al punto de casi ser nombrado director del Instituto Cervantes en la Era Aznar y de haber participado, sin ir más lejos, el último verano en la apertura del Campus FAES), dice que sí, que en las propuestas económicas liberales del PP coinciden por completo, pero la apuesta antilaicista, contraria a los matrimonios homosexuales, contraria a la despenalización del aborto, entre otras, lo alejan del partido de la gaviota. Y recordó, además, que los liberales en el PP son minoría (en contra de lo que ellos siempre dicen).
La nueva plataforma política, creada de arriba a abajo (como se generan todas las propuestas en este país, o al menos las que son cubiertas por la prensa -lo cual es una lástima-), apuesta de forma directa por el llamado centro, es un partido socialdemócrata que pretende atraer a los llamados social liberales, aquellos que, apostando por el mercado, no quieren olvidarse del progreso social y no rechazan de forma directa algunas correcciones coyunturales.
Hasta ahora, este partido había realizado los fichajes políticos (por llamarlo de alguna forma) en el PSOE (Rosa Díez y otros tantos, más o menos conocidos) y en intelectuales de trayectoria izquierdista (sin ir más lejos, Savater, que en sus inicios era un férreo socialista para acabar como socialdemócrata pensante, como el mismo indica), han reclamado que no se les vea como una escisión del PSOE (porque, realmente, no lo son) y no quieren ser competencia exclusiva del PSOE, sino del total de partidos. Y el fichaje de Mikel Buesa, hasta ahora líder del Foro de Ermua, fue un verdadero terremoto político y la mesa de dicho Foro saltó por los aires, se quejó del politiqueo interno y forzaron la dimisión de todos, ya que consideraban impropio que Buesa se presentara en unas listas. Pero Mikel Buesa se presentó por las listas del Partido Popular en Vitoria y nadie había dicho nada, y en ese entonces también era presidente del Foro. Pero ya se sabe, para los del Foro de Ermua parece que todos los partidos son iguales, pero algunos más iguales que otros. Con ello, las líneas de «liberales de izquierda» o de «liberales» en UPD se remarcan, mostrándose como competencia directa, también, del PP. Es otro de los partidos surgidos por el artazgo del clientelismo y estancamiento creados por los partidos existentes, sean nacionalistas o no, pero mayoritarios en sus ámbitos, léase PP, PSOE, PNV o CiU.
Esta plataforma tiene a su favor que dice las cosas claras, al igual que Ciudadanos – Partido de la Ciudadanía, se quiere presentar como honesto y directo (aunque en Ciudadanos pasó algo curioso, y repitieron en su interior con pasmosa velocidad lo peor de los partidos políticos tradicionales). Asó pues, UPD dice claramente que quieren modificar la constitución, en materia electoral sin dudas, y en materia de derechos también. Aunque hay nacionalistas españoles entre los upedeístas, hay que recordar que figuras como Savater son antinacionalistas en general, esto es, cargan también contra la idea de Nación Española como «lo importante», aunque sí parten de una España Unitaria, pero no desde la unión en destino que sería la nación (digamos que esto es lo que en otros lados la izquierda tiende a llamar «patriotismo constitucional», y que el PP llegó a utilizar en estas tierras). Muchos ven en este nuevo partido el republicanismo de antaño, el de la tradición española que llegó a unir a izquierdistas y derechistas (liberales, nunca a los conservadores monárquicos, por obvias razones) en un sólo partido, abocado al fracaso perpetuo (véase 1 y 2). Aunque lamentablemente no proponen darle una patada en el trasero a la Monarquía…
El modelo territorial quieren que sea cerrado desde la constitución, no como el formulado, que era un «que cada quien busque sus modelos, y estos concretos tienen otro modelo de desarrollo», así pues, apuestan por el igualitarismo en las competencias. Para ello, sería necesario una reforma constitucional, como para otras muchas de sus propuestas (creo que lo único que me gusta de este partido es que plantea la necesidad de reformas constitucionales para ayer, y es algo que todos los partidos mencionan por arriba -al menos cuando hablan del Senado-, pero no se atreven a abrir el debate).
Hablan, a su vez, de la necesidad de listas abiertas, limitación de mandatos, tutela judicial de los derechos de los afiliados a los partidos, y otros detallitos con los que quieren «dar vida» a la participación social (curioso en un partido que nace como nace, supongo que responderá un poco a la molestia en su militancia en otros partidos políticos y en el cómo se hacen ahí las cosas).
Y critican las políticas del PSOE actuales no por su fin, sino por ser simples limosnas y no cambios estructurales que permitan atajar los problemas. Viendo cuestiones como el «cheque bebé», en este sentido no les falta nada de razón. Pero no me queda claro cómo quieren, ellos, atacar esos problemas y qué soluciones estructurales proponen.
Los peor en UPD es que demuestran más odio a los nacionalismos periféricos que a otros problemas, o eso al menos es lo que termina saliendo en la prensa, el cómo atacan una y otra vez a los nacionalismos, como si fueran el principal problema (o un problema, si prefieren), alguna vez atacan a todos los nacionalismos (con ello al PP de forma frontal), pero se olvidan de que, si quieren ser un partido progresista, más que atacar deben plantear soluciones, y que el nacionalismo local puede generar una serie de clientelismos (de los que los dos partidos mayoritarios son parte), que ellos, hoy por hoy, no tienen (y está bien que lo remarquen) pero España tiene muchos problemas estructurales cuya causa y solución está muy pero que muy lejos del problema nacionalista. Pareciera que UPD quiere acabar con los nacionalismos, no con los problemas de los españoles (me pregunto si eso le dará votos provinientes del PP y disgustados con su partido).
En resumen, este partido es para: Los Liberales que no sean conservadores (contradictorio, siempre, que haya liberales conservadores, pero Europa es diferente) y los socialdemócratas que vean en el PSOE actual un partido sin rumbo ni políticas claras. ¿Y para todos los demás? Pues cada quien es hijo de su padre y su madre, y no me voy a poner a listar quiénes pueden votar por qué partidos.
Espero, eso sí, que no les pase como a Ciudadanos, aunque, viendo cómo los intelectuales de Ciudadanos, en su mayoría, dieron un paso al costado de la plataforma y cómo los de UPD siguen estando en la línea de batalla (aunque no quieran presentarse en las listas).
Concuerdo con todo, solo precisar una cosa, para mi los nacionalismos perifericos si bien no son el principal problema de este pais (pondria la vivienda y la falta de competitividad de la economia) si es uno de los principales.
La verdad es que si Ciudadanos hubiera tenido mejor pie y menos peleas estaria mas interesado en este proyecto, pero de momento permanezco esceptico aun cuando cae mas o menos dentro de lo que simpatizo.
Por cierto, ya que te di mucho palo con tus errores de JavaScript es bueno felicitarte por el rediseño ahora sin errores :D
Saludos
En parte el problema de Ciudadanos fue llenarse de «oportunistas» (sólo hay que ver quién se presentó en Salamanca para saber qué gente se terminó acercando a dicha formación política) y al paso al costado de la mayoría de intelectuales del manifiesto que dió lugar al partido. Espero realmente que en UPD no repitan esa experiencia (porque ver nuevos partidos es saludable, ver que esos partidos caen en lo que denuncian resulta triste).
Hasta Luego y gracias por el comentario (¡coincidimos en casi todo! eso no pasa a menudo :P)
PD: Las gracias hay que dárselas a lso que aparecen en los créditos de abajo y a los de WP, que con la actualización se volvió incompatible mi anterior plantilla con el sitio :P.
¿voca?
Saludos
Corregido, gracias.
Hasta Luego ;)