

Como minirreseña de hoy toca «Detective: un juego de investigación moderno. Temporada 1», juego diseñado por Ignacy Trzewiczek, Weronika Spyra y Merry Trzewiczekcon con arte de Mateusz Bielski, Maja Budner, Maciej Janik, Tomasz Jedruszek, Ewa Kostorz y Rafał Szyma, publicado originalmente por Portal Games en 2020 y traído a España por Maldito Games ese mismo año.
Tres extraños casos han llegado a tu agencia, ¿serás capaz de resolverlos?
Estamos ante un juego cooperativo de deducción e investigación dentro de una experiencia lúdica.
Vamos al lío:
Características principales
- Tipo de juego: narrativo, experiencia.
- Mecánicas principales: deducción, toma de decisiones y gestión de tiempos.
- Jugadoras: 1 a 5.
- Duración: 90-120 minutos.
- Nivel de azar: ¿nulo?
- Dependencia del idioma: absoluta.
- Componentes: 96 cartas (72 de casos y 24 de retratos), 16 fichas de cartón, 2 fichas de madera. 1 tablerito de cartulina, 1 hoja de resumen y 1 reglamento. Tiene un enlace para acceder a una aplicación web que es necesaria.
- Edad recomendada: 12 años o más.
- Sobre el tema: en este juego el tema lo es todo, el título es, sobre todo, una experiencia narrativa en que debes participar activamente en la investigación. Formas parte de una agencia de detectives y debes introducirte en el caso para llegar a una conclusión.
- Nota sobre los materiales: nada destaca ni por bueno ni por malo. Es innecesario que las fichas de personajes sean fichas… de hecho, son innecesarias esas fichas. La caja es demasiado grande para el contenido físico del juego. Requiere conexión a Internet para usar la aplicación web.

Breve explicación
El objetivo del juego es resolver un caso. La partida finaliza cuando no haya más «tiempo» y se tenga que ir a las preguntas en la web.
La preparación es simple y directa, se reparten las fichas de personaje, se coloca el tablerito en el medio y se cogen las cartas del caso (las de su mazo ordenado y las de retratos) y se siguen las instrucciones del caso (dónde colocar la ficha de carro y la de reloj, así como cuántas de otras fichas necesitas). Ah, te metes en el caso en la aplicación web.
El desarrollo es muy sencillo en cuanto a la mecánica, pero hay que tener mucho orden. Las cartas están numeradas y se llaman unas a otras, a veces con múltiples opciones que debes elegir, contando el si das o no la vuelta a la carta (eso a veces tiene un coste y a veces no). Durante la partida, irás consultando la base de datos, donde introducirás lo que vas obteniendo, eso te puede llevar a todo tipo de material (texto, archivos multimedia, etc.). De vez en cuando, te vas a mover de una localización a otra, eso consume 1 hora. Cada carta tiene un consumo distinto de tiempo (entre 1 y 3 horas, usualmente). Una vez que se te acabe el tiempo, debes resolver el caso.
El grupo siempre está junto, esto es, la información en todo momento es para todo el mundo que está jugando, con lo que da un poco igual si son 1 o 100… bueno, no, porque las fichas de recursos «dependen» del número de personas jugando y no me queda claro el porqué.
La partida finaliza cuando se acaba el tiempo (o antes si tienen la certeza de lo que ha ocurrido), se va a la aplicación web y se contestan unas preguntas, según lo bien o lo mal resuelto, dará un puntaje u otro.

Una opinión… con comparativa
Este juego es la reimplementación de «Detective: un juego de investigación moderno», volviendo todo más simple, sencillo y breve. Es como la versión «pequeña» de ese grandísimo Detective (para mi gusto, el mejor de este tipo de juegos de investigación narrativa que he probado), pero pequeña en todos los sentidos: desde el número de casos (3 frente a 5), la duración de los mismos (juraría que son la mitad de cartas por caso), la profundidad de estos (por no decir que en el original había una metatrama que conectaba todos los casos, contando que, según lo que hacías, unas cartas iban de unos casos a otros, aquí son totalmente independientes) y determinados elementos mecánicos que, al retirarse, facilitan mucho la vida pero quitan estrés (contando que te quitan las fichas de estrés). Luego me extenderé sobre esta comparativa… por ahora, me centro en este título:
El arte del juego es correcto en todos los sentidos, no deslumbra pero cumple perfectamente su cometido, el diseño gráfico acompaña la obra y, en su conjunto, es agradable y fácil de jugar gracias a lo que aporta este elemento… pero no deslumbra ni tiene personalidad propia.
El tiempo está relativamente acotado y dependerá mucho más de cuánto el grupo discuta sobre un elemento u otro, con esto también quiero decir que el tiempo se ve influido por el número de personas que jueguen… o, mejor dicho, las vueltas que se le da a un asunto, sea en grupo o de manera individual.
Así que guárdenle una hora como mínimo a cada caso y piensen que igual están dos horas con él. Eso sí, son casos que enganchan y, a la vez, son ligeros, con lo que el tiempo pasa volando.
El azar, como tal, no existe en este juego, aunque a veces no tienes mucha información para decidir si sigues el camino A o el B, con lo que esa decisión tiene un punto de azar (intuición) elevado, pero es una decisión, a fin de cuentas. Tampoco podemos hablar de si es táctico o estratégico, si bien es cierto que puedes desandar o puedes tirar para adelante todo el tiempo, eso te lo va marcando la deducción grupal.
El uso de una aplicación web es una limitación para muchos entornos y momentos, o para gente que no quiera saber nada de tecnología. Solo tengo una pega muy grande con estos casos: algún vídeo no estaba traducido. No digo ya doblado (sería lo ideal), directamente los subtítulos no se podían poner en castellano.
La forma en que la base de datos funciona, la verdad, es un punto muy a favor de este juego; sientes que de verdad estás usando recursos que se ven en cualquier serie moderna de investigación procedimental, donde una pista te lleva o no a otra según lo que has investigado o no en otro lugar. Esto es, si en el escenario A has encontrado unas huellas y luego le consigues tomar las huellas al personaje Equis, es genial que la base de datos te ponga ¡coincide con la huella del escenario A!; ¿y de quién es la huella del escenario B? ¡A saber! Lo mismo con otra información a mayores que te da la base de datos. Y eso es mucho mejor que el que te pongan en la carta del Escenario A «esta huella es de fulanito», porque ese Fulanito no lo conoces aún o no tienes por qué conocerlo. Sí, te podrían poner un código de huella y comprobarlo manualmente, pero sería mucho más rollo y hay muchos sitios donde esa huella (o la evidencia que sea) puede aparecer.
La aplicación web también sirve para resolver el caso, y te da un resumen, si no recuerdo mal, de las pistas bien obtenidas. Junto con ello, te da información estadística de cómo contestan las demás personas que lo han jugado (y está interesante ver cómo en una que has acertado más gente falla o una que has fallado casi todo el mundo acierta). Pero en esta versión del juego las preguntas son pocas, básicas y sin mucho lugar a subpreguntas (algo que sí pasaba en el juego grande del que luego hablaré). Sintiéndose algo escaso. Si fallas mucho, puedes repetir el caso sin ver el informe final. Si ya estás conforme con tu nota o no quieres repetir, puedes ver el informe final con la resolución del caso.
Creo que los tres casos tienen una dificultad similar, aunque es más guiado el primero (igual es para que te acostumbres a las mecánicas) y el tercero fue el que me pareció más interesante (quizá por la película que nos montamos, mucho mejor que la resolución final –que sí, que la acertamos, pero nos reíamos más con la que fuimos montando–). Sí deja buenas pospartidas, en tanto que hay muchos comentarios sobre la trama que hemos vivido (en este sentido, se parece mucho a ver una buena película con tu grupo habitual en el cine y comentarla durante la película y después de la misma).

Como juego bien hecho, no hay una carta que te diga «este es el asesino» o «este es el motivo», si no que puedes llegar a esa conclusión de varias formas… lo que más fastidia es llegar a una conclusión y luego ver que las otras pistas donde gastas tiempo son para reforzar la conclusión que ya tenías (aunque tomaste esas pistas o porque no se te abrían otros caminos o porque pensabas que te darían el motivo). Está bien tener claridad sobre un elemento, pero lo que buscas es conseguir varios. Eso no es culpa del juego, si no de tus vías para decidir una u otra pista que seguir.
De los tres casos, uno no necesita de la aplicación web más allá de para resolverlo (lo del informe final). Me gustó el caso en sí mismo, pero también se sintió que desaprovechaba un elemento diferenciador de estos Detective, con lo que lo ponía en la misma liga de otros juegos narrativos de deducción, de los que hay muchos y variados.
Es imposible hablar de este juego sin compararlo con el original; del original tengo pendiente hacerle una minireseña desde hace muchos años, la verdad. El original tiene el problema de la duración (alguna partida se nos fue a más de 4 horas) y es increíblemente ambicioso, además, mediante la mecánica del tiempo (en aquel, son «días» con sus horas de trabajo, con lo que tenías dos elementos temporales a tener en cuenta, si te pasabas de las horas, generabas estrés) y la mecánica del estrés (pasarte del tiempo por día así como determinadas situaciones generaban estrés, si llegabas a un estrés determinado, se acababa la partida y debías resolver) el juego «apretaba» y mucho en un sentido bastante «realista» de una investigación contrarreloj.
Aquí el tiempo es «sumado» (tienes «equis» horas para resolver el caso) con lo que se siente más bien como un simple «contador» que hay que gestionar, valdría lo mismo si te dijeran «solo puedes ver 22 de las 30 cartas». Es cierto que el tiempo no solo se gasta en las cartas, si no también en los desplazamientos (con lo que hay que intentar hacer el mínimo número posible de estos) y en información extra, con lo que el contador está más que justificado, pero no «agobia» como en el juego original.
El juego grande, para determinadas cosas, te pedía fichas de un tipo determinado; estas fichas venían de los personajes, habiendo varios tipos y siendo un recurso temático muy interesante; en este pequeño las han sustituido por fichas genéricas, simplemente un recurso que pagas para poder investigar algo… que no tiene gracia. Las fichas temáticas del grande servían para mostrar como los personajes se agotaban, así que en algunas situaciones recobraban fuerzas o tenían impulsos. Aquí simplemente son un recurso que obtienes y gastas, sin vínculo temático con los personajes o con nada.
Esos elementos mecánicos eran un hecho diferencial muy grande sobre otros juegos de experiencia narrativo deductiva, generaban unas dinámicas claras de agobio, de jugar contra el tiempo y contra los elementos, muy propias de este tipo de historias (sin desvelar mucho, una de los casos se basaba en llevar al extremo este punto), al perder esos elementos, la forma de jugar es más amable y ligera, pero pierde mucha de la gracia que tiene el primero, las sensaciones con el juego son totalmente distintas, siendo el mismo título en esencia (¡cómo cambian las cosas por unas pocas modificaciones!).
Además, Detective funcionaba como una «campaña», lo cual aportaba muchísimo, recuerda totalmente a cualquier serie en que hay una metatrama que cada capítulo avanza un poco, que siempre está presente, pero que no es «el caso» que estás resolviendo. Eso desaparece por completo aquí, acercándose mucho más al común de los juegos temáticos, narrativos y de experiencia.
Como digo, este es más sencillo, mecánicamente y en los propios casos. Y eso no es malo en sí mismo, quiero decir, si tienes un tiempo más limitado o no tienes ganas de meterte en una megahistoria, este juego es mucho mejor que el grande. De hecho, el que se pueda jugar los casos sueltos y vengan tres supone que lo puedes disfrutar con personas o grupos distintos sin tener que «atarte» a una campaña con un grupo determinado. El grande, en cambio, requiere jugarlo como «campaña» y te obliga a apuntar y ordenar mucha información; en estos tres casos de esta Temporada 1, por su parte, se puede jugar sin apuntar nada sin ningún problema.
En rejugabilidad, ambos andan igual de escasos (lo usual en este tipo de juegos, claro), personalmente veo la experiencia del juego original más completa y cercana a las series procedimentales que emula, y este pequeño mucho más cercano a una experiencia narrativa de «casos sueltos». Detective ha tenido varias encarnaciones con distintas temáticas; el original cuenta con algunas expansiones, mientras que esta temporada 1 parece que se quedó en un quiero y no puedo y eso se refleja en que no saldrá la Temporada 2.