A veces se nos acusa, a quienes plantamos una respuesta frontal al fujimorismo, que olvidamos los «triunfos» logrados por Alberto Fujimori durante los noventa; también nos señalan indicando que sólo nos fijamos en el pasado, sin reconocer que Keiko Fujimori es una «demócrata» que rescata, en el fondo, lo mejor del fujimorismo. En otras palabras, que nos oponemos a Fujimori por ser hija de, y no tanto por sus ideas. Que le sacamos en cara lo que hizo su (condenado) padre y no lo que es ella o su formación en la actualidad. [Sigue leyendo en De Igual a Igual].