Sin derecho a residir

Así es como entienden el camino a la paz: Represaliando al enemigo. Ni más ni menos. Puede hacerse construyendo más viviendas en zona ocupada para dificultar el proceso, puede hacerse amenazando con expulsar a palestinos de territorio palestino. Luego se preguntan por qué tener el territorio dividido no es un problema. Israel, como siempre, antepone la vía militar, y así se entiende que saquen una Orden Militar (estas cosas ni pasan por el parlamento, ya de por sí controlado por la extrema derecha israelí) que permitirá la deportación de miles de palestinos de Cisjordania, a la par de dejar abierta la puerta a acusaciones que ameritan penas de hasta 7 años de cárcel. Orden dada en octubre del año pasado, firmada por el general Gadi Shamni, comandante de las fuerzas de Israel en Cisjordania, que ahora entrará en vigor.

Ya que los tribunales civiles hasta ahora han impedido que se expulsen a las personas objetivo de la nueva Orden Militar (esto es, esposas extranjeras de palestinos, palestinos residentes no regularizados en Cisjordania -porque viajaron al extranjero, por ejemplo, por ser nacidos en Gaza y no tener sus papeles en Cisjordania, o lo que corresponda), el gobierno ha decidido pasar por alto las instituciones jurídicas pertinentes y lo lleva al fuero militar (si lo hace Estados Unidos con los acusados de terrorismo, ¿por qué no ellos?), así los casos de «infiltrados» (término retorcido y ampliado por el propio decreto) irán por los controlados tribunales militares que procederán a expulsar, poner penas de 7 años de prisión y multas de hasta 7500 nuevos shékeles (unos 1500 euros o 2040 dólares). Se podrá expulsar, denuncian, hasta a los hijos de palestinos nacidos en Cisjordania de padres nacidos en Gaza que tengan el estatus de residente en la Franja y no en el enclave.

La orden, como suele pasar en estos casos, es lo suficientemente ambigua para que sea aplicada de forma arbitraria por los mandos militares, máxime teniendo en cuenta la ilegalidad en la residencia de muchos palestinos, que en sus propias tierras son considerados irregulares… No olvidemos que uno de los derechos recogidos en la Declaración Universal de Derechos Humanos, artículo 13, determina la libertad de circulación interna, con derecho a fijar su residencia donde le plazca, así como el derecho a salir de su país y a poder volver, dos derechos que Israel incumple sistemáticamente cuando hablamos de ciudadanos palestinos, pero claro, son una raya más al tigre.

Y luego el gobierno de Israel se queja de las comparaciones de lo que hace en los territorios de Gaza o Cisjordania con lo que el pueblo judío, al que dicen representar, sufrió en sus propias carnes durante el holocausto realizado por el gobierno nacionalsocialista alemán hace ya más de medio siglo.

2 comentarios en «Sin derecho a residir»

  1. Sin derecho siquiera a «existir» que es peor. Al menos ahora, aunque castrense, Israel se cuida de «sancionar leyes militares». Como bien ha demostrado el historiador israelí Ilán Pappé desde 1947 a la fecha la limpieza étnica de Palestina ha sido eficaz y continúa. A pesar del derecho internacional, a pesar de la ONU, a pesar de las declamaciones, a pesar de… El patio trasero de occidente está sucio, y nadie se atreve a pasarle la escoba.

    Salud!!

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