¿Emprendedor = Dinero? No y sí

Loretahur participará en la mesa de «Ciuddanos Inquietos: Emprendedores» de las primeras Jornadas sobre Blogs, e-gobernment y participación Digital I-Cities, y fiel a su estilo, ha comenzado el debate «pre-mesa» en la Red como fórmula de preparación de la misma y plantea dos preguntas bastante interesantes que, desde el escepticismo y el indeterminado mundo de las sensaciones, pasaré a contestar como bien pueda.

¿Sólo eres emprendedor en la Red si obtienes dinero con tu servicio, negocio, etc…?

No y Sí. Los autoerigidos como grandes gurús empresariales en la Red de Redes y en todo este tinglado de la Web 2.0 (sobre la misma, véase «Comunidades y redes sociales» de Versvs) han decidido que «emprendedor» es el perfecto y moderno eufemismo para «empresario» en el maravilloso mundo de los bordes redondeados.

Así pues, se celebran conferencias sin parar por parte de emprendedores para nuevos emprendedores, en las que en realidad se habla de empresas que se moverán casi exclusivamente en la gran red llamada Internet. No importa siquiera que estemos hablando de un empresario emprendedor (no todo empresario lo es), sino realmente de un empresario que puede, con un poco de suerte, ser realmente un emprendedor (en el significado que da el DRAE: «Que emprende con resolución acciones dificultosas o azarosas»). Emprendedor, hoy por hoy, va reemplazando al término empresario en muchos sentidos, y la red ha sido de las grandes beneficiadas de la neolengua pura y dura.

Ya se habla de «emprendedores sociales«, que son los creadores sin ánimo de lucro (al menos, no es el objetivo principal, si algo cae, pues bien) de las redes sociales actuales, y de toda una serie de organizaciones de ámbito social (pero nos centramos en la Red, ya que ahí es donde se desarrolla principalmente el mundo de I-Cities). Responde a la lógica de poner nuevos nombres a viejos hechos, en medida como respuesta a la confusión terminológica causada por el ya mencionado «empresario igual a emprendedor«.

Así que sí, emprendedor como eufemismo de empresario, es igual a hacer dinero. ¿Que no debemos aceptar la neolengua? A veces creo y siento que en Internet hemos perdido esa batalla, que en vez de luchar contra la terminología impuesta por los gurús de los mil enlaces habría que adaptarse, luego recuerdo que el lenguaje construye, así que no podemos aceptar pulpo como animal de compañía (a no ser que querramos perder una palabra en concreto, que algunas están para olvidarlas).

¿Qué primas más tú: la economía del dinero o la economía del enlace (linkonomics)?

¿Ninguna? Supongo que al no ser un emprendedor alias empresario no vivo en ninguna de las dos economías de la Web2.0 recién estrenada (o Web1.0 con nuevo nombre, o mejor, simplemente Web). Más aún, no creo que la «Web2.0» sea una «revolución social» ni una «revolución tecnológica», sobre lo segundo, más bien es una evolución interesante y amplia de tecnologías y la gratuidad de los servicios (o mejor, que se basen en la publicidad y no en la suscripción), sobre lo primero, creo que desde los primeros tiempos de Internet el usuario ha sido también creador. Ahora la base de usuarios ha aumentado exponencialmente, innegable, ahora muchos han visto el valor de compartir lo creado, genial, pero no es algo nuevo literalmente hablando. ¿Más extendido tal vez? Ni eso. ¿Cuantos usuarios tiene la red y cuantos aportan? Y no, dar tus datos personales a una «red social» no es aportar, es exponerse.

Pero me he salido mucho de la pregunta: ¿dinero o enlaces? Supongo que si hablamos del emprendedor que es empresario, la cuestión es que lo segundo reditúe en lo primero, si hablamos de Negocios2.0, la Red de Redes se sustenta en gran medida en la capacidad para enlazar y ser enlazado (es curioso cómo Youtube no facilita la descarga de su contenido, pero en cambio, anima a incrustarlo, esto es, no se quiere el uso «fuera de línea», pero se incentiva el uso «en línea» de todas las formas posibles, aunque consuma su ancho de banda sin que la persona llegue a visitar el sitio «necesariamente»).

Para todos los demás, los enlaces crean las redes y las redes permiten el acceso a contenidos que, fuera de las mismas, pueden pasar desapercibidos. Sin contar con la importancia que tienen los enlaces a la hora en que se valoriza un contenido por parte de los buscadores y demás listas de populares y todo ese rollo (¿recuerdan la que se montón con la actualización de la clasificación de bitácoras en Blogalaxia?).

De todas maneras, no por gusto se comercializa con los enlaces…