Ayer la conservadora Lima, dentro del muy conservador Perú, celebró la marcha en favor de la Unión Civil entre personas del mismo sexo (fotos). Fue un éxito. Es que ya lo era desde el momento en que cumplió uno de sus objetivos: visibilizar el reclamo, el tema. Incluso El Comercio ha estado abordándolo bastante y no de forma unidimensional -más desde las columnas de opinión (con dos líneas de comentarios contrapuestas), y dejando más espacio para los incendiarios en la parte de las noticias-. Sobre el tema, una bitácora que lo ha tratado bastante y, además, bien, es la del Útero, así que les dejo el enlace hacia la etiqueta «Unión Civil» y vayan navegando por esa página.
Etiqueta: familia
Matrimonio, lo demás es maquillaje
Carlos Bruce vuelve a insistir en un tema que ya presentó en el pasado: las uniones civiles entre personas del mismo sexo (del que hablé en su día; proyecto no aprobado y archivado en la comisión correspondiente –pdf-). En realidad, la timorata propuesta de hace tres años del congresista se basaba en un acuerdo contractual de contenido netamente patrimonial (y fue rechazado por poder hacerse ya con otras modalidades de comunidades de bienes), ahora va más lejos y plantea una «Unión Civil no Matrimonial para personas del mismo sexo» (Proyecto de Ley 02647/2013-CR). Ya comenzamos mal. Primero: ¿por qué una unión civil solo para homosexuales? La verdad es que, ya puestos, se puede regular también para heterosexuales en la misma norma (no, tampoco es lo mismo que una unión de hecho); segundo: ¿de verdad hacía falta lo de no matrimonial en el propio título? Si es una «unión civil» y no un «matrimonio» queda claro, desde el nombre, su contenido no matrimonial.
La familia excluyente de la «Iglesia Oficial»
Si uno coge partes del discurso de Rouco Varela, presidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo de Madrid, el otro día, el dicho durante la macro misa en Madrid (lo que hace tener apoyos en determinadas instancias políticas y administrativas), y no puede estar más de acuerdo, la importancia del amor en la creación de la familia y demás, pero luego él, Varela, llega a conclusiones imposibles e insostenibles. ¿Por qué determinada legislación «ataca» la «familia»? Incluso el concepto de familia que él tiene (o ellos, como prefieran) no puede ser único y exclusivo, porque dejaría de lado situaciones que se dan de forma totalmente natural (y el matrimonio no es, para nada, natural, sea dicho).
La Iglesia y «su defensa» a la «Familia»
Publicado originalmente en De Igual a Igual
No defienden la familia, que nadie se engañe. Ese encuentro por la defensa de la familia cristiana celebrado hoy en Madrid defiende un modelo concreto de familia que nada tiene que ver con el amor o el compromiso de vida en común, puesto que se circunscribe a un fin básicamente reproductivo y opresor, de mandante y mandado, en donde la persona no puede desarrollarse y cualquier palabra en contra de los cánones de jerarcas se considera un delito para con todos. Lo rancio de la Iglesia Católica, acompañada de lo podrido y más conservador de otras Iglesias cristianas que consideran que tienen derecho a indicar cómo otros deben vivir, se han manifestado en Madrid. El divorcio no está acabando con la sociedad, no lo ha hecho en ninguna de las sociedades donde ha existido la separación de la pareja, la homosexualidad no es un ataque a los heterosexuales.