La columna de hoy en Perú21 de Marco Sifuentes (también conocido como ocraM), Perú2.1, se titula «Este partido no se juega en Internet» y es bastante buena. Como suele ser habitual, se fija en el hecho tecnológico para tocar varios extremos de un mismo debate, o de muchos debates confluentes… El tema, parcialmente, gira en torno al fracaso, esta vez, de las nuevas tecnologías como generadoras de redes espontáneas de acción social. Es un tema recurrente, «los límites de Internet», de las acciones en Internet, de la trascendencia de lo que se hace y finalmente de la comodidad para indignarse y firmar manifiestos detrás de una pantalla.