[Publicado originalmente en De Igual a Igual]
Se vuelve hablar de este caso tras el fallo de interpretación de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que aclara ciertos puntos de una sentencia bastante controvertida en que obliga al Estado a realizar un reconocimiento público de las víctimas de los ajusticiamientos y pagar indemnizaciones a las víctimas o sus familiares. En el imaginario de muchos peruanos los presos “se lo merecían”, en dicho imaginario, el Estado tiene la potestad de tratar como cosas a todos los reos por delitos especialmente graves, como son los de terrorismo. No importa, en dicho imaginario, que las personas ya estén siendo castigadas, y contra muchas de ellas no pesara condena firme, pues socialmente estaban más que condenadas, y políticamente claramente perseguidas tras el golpe de Estado que Fujimori propinó a la democracia para arrogarse el poder absoluto en el país. Así que viene bien recordar qué pasó en el Penal y cómo no fue la primera masacre en una de nuestras cárceles (así que ya existía un mal precedente de malos tratos a presos, asesinatos e impunidad de las autoridades que ordenaron dichas masacres).