Lo más carca de la derecha. Lo bueno, por un lado, es que no se pone caretas falsas y habla de igualdad cuando no cree en ella, lo malo es que la libertad y la igualdad debieran ser primordiales en cualquier plan de gobierno, y Berlusconi sólo piensa en su bolsillo (y en el de sus amigos, todo hay que decirlo). Así que ha sido ganar las elecciones y mostrar su desprecio total por las mujeres. Lo que es peor, cuando intentó matizar sus palabras (dichas, según comentan, sonriendo y tan campante, como es él y sus circunstancias plásticas), Berlusconi arruinó lo poco interpretable a su favor de esas primeras declaraciones.