¿Esquizofrenia?

La aprobación mediante referendo del Estatuto de Autonomía fue un varapalo curioso para todos los partidos, por la baja participación en el referendo. Los partidos que votaron el estatuto en el parlamento andaluz y las Cortes de España debieran sentirse avergonzados. Pero, en un caso más de esquizofrenia del Partido Popular, desde las autoridades peperas se ha acusado al PSOE de la baja participación, diciendo que el régimen totalitario de Andalucía y el presidente Rodríguez Zapatero son los culpables de que los ciudadanos no acudan a votar.

A Rodríguez Zapatero se le acusa de abrir la caja de las reformas estatutarias y del régimen territorial español, y que esos son temas que no interesan al ciudadano y que por ello no votan, además, que se ven sobrepasados por lo que el presidente realiza. Al régimen andaluz (del PSOE) se le acusa de «dictador» y de quitar las libertades a sus ciudadanos y que por ello los andaluces ya no votan (en este caso, el Referendo de aprobación del Estatuto).Hay que desmontar algunas cosas por ser medias verdades o mentiras: Por un lado, el régimen territorial español está en la Constitución, no en los estatutos, y, lamentablemente, no se ha abierto la reforma constitucional. Las reformas estatutarias como mucho tocan techo en el reparto competencial, pero en ningún caso -por ahora- superan el techo constitucional. Y será el Tribunal Constitucional, dado el caso, quien decida si algún estatuto está mal hecho. Así que no se ha abierto la reforma del sistema territorial español.

Por otra parte, el Partido Popular se ha sumado alegre a estas reformas, hasta Castilla y León está reformando su estatuto de Autonomía. El primer estatuto reformado fue el de Valencia, comunidad del PP, y en Andalucía el estatuto está pactado entre los dos grandes partidos. En otras palabras, si tan mala es la reforma de los estatutos de autonomía ¿Por qué el PP se ha sumado a las mismas? Los estatutos han sido reformados en múltiples ocasiones, la diferencia es que ahora se está haciendo en todas las comunidades autónomas a la vez, contando las del PP. ¿Por qué critican algo que ellos están haciendo? Existe un claro doble discurso en el PP, muy autonomista en ciertas zonas, y muy antiautonomista a nivel nacional.

Lo del régimen totalitario en Andalucía, bueno, es una patraña como un templo. Sí, hay mucho clientelismo en esas zonas, como en todas las comunidades españolas, y sí, es necesario una renovación (como lo era en Galicia -mayoría absoluta del PP durante muchísimos años-, en Cataluña -por parte de CiU durante unos 20 años-, País Vasco -feudo del PNV desde el comienzo de los tiempos- y otras tantas zonas, lo mismo podríamos decir de los ayuntamientos y diputaciones provinciales), pero de ahí a acusar al gobierno Andaluz de ser una cuasi dictadura en una medida que ellos mismos aprobaron y promovieron como lo mejor para la comunidad autónoma, hay un trecho bastante grande.

La participación en la aprobación del estatuto de autonomía ha sido patética. Eso es innegable. Pero la responsabilidad no es sólo del gobierno autonómico de turno (y acá el gobierno central no pinta nada), sino más bien es de los partidos que apostaron por el sí. Son quienes tenían la responsabilidad de convencer a los ciudadanos de la importancia de votar de forma positiva al texto estatutario, y en ese fregado estaba también el Partido Popular, echar balones fuera es más que patético. Y sí, el PP se sumó voluntariamente, participó activamente y votó que sí al estatuto de Andalucía. Que ahora digan que no tenía demanda social y que todo era malo es contradictorio con su propia participación. El PP parece esquizofrénico en estos temas.

En fin, el PP quiere atacar al Gobierno, es lógico, es parte de su papel como principal partido opositor. Pero en vez de atacar con su arsenal ideológico (que lo tiene), los errores del gobierno (que los tiene) o cualquier cuestiones de verdadera relevancia, atacan con chiquilladas, dobles raseros (¿por qué la aprobación del Estatuto Gallego no fue culpa del gobierno provisional, allá en 1980, cuando la participación fue aún más patética que en el caso actual?), y demagogias varias (como todo el tema del terrorismo, pocas veces he visto tanta demagogia a la par que mentiras -como la supuesta «no negociación» con ETA, cuando antes era una negociación admitida-). El PP no está haciendo de oposición, está haciendo el ridículo. Sin más. Gritan demasiado, no dicen nada, y cansan. Cansan mucho.

Por cierto, al hilo de todo esto, vean esta curiosa entrada en 14 de Abril.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.